Manifestantes israelíes y familiares de prisioneros en Gaza bloquearon la calle Ayalon, la principal vía de tráfico en el centro de “Tel Aviv” y exigieron un acuerdo para la liberación de los encarcelados.

Los ciudadanos responsabilizaron al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de obstaculizar el acuerdo y lo acusaron de arrastrar a todos hacia una guerra regional en lugar de traerlos de vuelta a casa solo para mantenerse en el poder.

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En la protesta, realizada bajo el lema "326 días de abandono", los participantes portaron pancartas donde podía leerse: "No hay un acuerdo imprudente, solo una concesión" y "Netanyahu está enterrando a nuestros hijos".

Con anterioridad, el sábado pasado decenas de miles de colonos se manifestaron en varias ciudades principales en los territorios ocupados, exigieron un acuerdo de intercambio de prisioneros, la dimisión de Netanyahu y la convocatoria de elecciones anticipadas.

En este punto, instaron a Netanyahu a renunciar a sus demandas, como "mantener una presencia militar en la frontera entre Gaza y Egipto".

Los protestantes advirtieron que las conversaciones actuales representan "la última oportunidad" para liberar a los prisioneros, ante la posibilidad de una escalada bélica en la región si esta ronda fracasa.