Colonos israelíes llamaron a huelga ante la opción de seguir en guerra
Las calles de "Israel" vibraron este domingo en preparación de protestas en numerosas instalaciones para paralizar a la entidad sionista y exigir la revocación de la decisión del Gabinete sobre la permanencia de sus tropas en el eje Filadelfia, claro obstáculo para retardar el acuerdo de alto al fuego en Gaza y el intercambio de prisioneros.
Tras la confirmación de la muerte de seis rehenes israelíes por fuego del ejército sionista mientras intentaban liberarlos en la Franja de Gaza, se difundieron llamados para un ataque civil generalizado este lunes, con acciones de protestas en instalaciones terrestres, marítimas y aéreas, instituciones oficiales y educativas, entre otras.
Los colonos más enojados no esperaron hasta la mañana para condenar al primer Ministro, Benjamín Netanyahu, y desde las 18:00, hora local, de este domingo comenzaron a llegar a las plazas de “Tel Aviv” y del Jerusalén ocupado, para patentizar su indignación.
#Focus Cientos de miles de “israelíes” culpan a Netanyahu por la muerte de seis cautivos en Gaza, los principales sindicatos convocaron una huelga general para exigir la firma de un acuerdo de paz y el regreso de los cautivos. pic.twitter.com/aZHYiBYsJT
— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es) September 2, 2024
Algunos observadores expertos estimaron el número de manifestantes en "Tel Aviv" alrededor de la medianoche en 280 mil personas, a pesar de los numerosos intentos de la policía local de dispersar las concentraciones.
Según reportó el Canal 12, hasta ese momento se sabía de al menos 15 manifestantes arrestados.
Los participantes en la marcha en puntos de los territorios ocupados exigieron que el gobierno de ocupación se retracte de su decisión de permanecer en los corredores de Filadelfia y Netzarim y regresen a la mesa de negociaciones con Hamas, con la esperanza de recuperar a los rehenees sobrevivientes aún con vida.
Una vez más, la población israelí comprobó que son las operaciones militares de su propio ejército las que provocan la muerte de los prisioneros en poder de la Resistencia, lo cual contradice uno de los objetivos declarados para justificar la guerra por más de diez meses continuados.
A raíz del incidente de este domingo, y del creciente movimiento en las calles, el ministro de Seguridad, Yoav Galant, declaró: "Si queremos a los prisioneros vivos, no tenemos más tiempo", y exigió del gobierno otro debate para cancelar la decisión del pasado jueves sobre la permanencia en el eje de Filadelfia.
Las palabras de Galant generaron una gran ola de objeciones dentro del gobierno israelí, y algunos titulares, como el de Finanzas, Bezalel Smotrich, pidieron su destitución porque consideran que someterse a las demandas de Hamas es perder la guerra.
También la oficina del primer ministro atacó duramente a Galant, y consideró que había "perdido la cabeza", porque con sus palabras provocaba más protestas en las calles contra el gobierno genocida.