Grupo de Amigos de la Carta de la ONU en solidaridad con Venezuela
Grupo de Amigos de la Carta de las Naciones Unidas expresa solidaridad con Venezuela y hace un llamado a derogar las más de 947 medidas coercitivas unilaterales que afectan gravemente a su pueblo.
El Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de Naciones Unidas condenó categóricamente el último conjunto de medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos contra Venezuela, en "un nuevo ataque directo al derecho inalienable a la autodeterminación de su pueblo y a su sistema democrático".
Mediante un comunicado divulgado por la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), precisó que tales medidas buscan crear desestabilización sobre el terreno e imponer un golpe de Estado contra las instituciones constitucionales y las autoridades legítimas y democráticamente electas en ese país.
También denunció la promulgación de estas medidas "ilegales, injustificadas y desproporcionadas" como parte de una operación internacional en curso para alterar la voluntad soberana de los venezolanos expresada con su voto en las elecciones del 28 de julio pasado.
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— ALBA-TCP (@ALBATCP) September 15, 2024
Los Estados miembros deploraron la "ilegal promulgación e implementación" de más de 947 medidas coercitivas unilaterales las cuales además de afectar el pleno goce y disfrute de los derechos humanos "ocasionan pérdidas tanto humanas como económicas, así como el saqueo y pillaje de recursos financieros y bienes venezolanos en el exterior".
A través de la declaración, el Grupo de Amigos de la ONU se unió al pueblo venezolano y a la comunidad internacional para exigir la derogación completa, inmediata e incondicional de las medidas.
Igualmente, reiteró su pleno apoyo y solidaridad con la República bolivariana.
Exigió poner fin inmediato a todos y cada uno de los esfuerzos externos encaminados a inmiscuirse en los asuntos internos de esa nación, incluso mediante el recurso a la amenaza del uso de la fuerza contra la integridad territorial e independencia política, y a fabricar falsas narrativas y tensiones para socavar la paz y la voluntad soberana del pueblo.
En este contexto, reconoció el derecho de los ciudadanos de Venezuela a elegir libremente su sistema político, económico, social y cultural en el marco de un modelo participativo y protagónico de democracia.