Combatientes de Hizbullah de Líbano seguirán ejemplo de los mártires
Los combatientes de la Resistencia de Líbano aseguraron en un mensaje a las familias de los mártires de Hizbullah que llevarán a cabo sus metas hasta lograr una clara victoria sobre los enemigos de la religión.
Los combatientes de la Resistencia de Líbano (Hizbullah) reafirmaron su compromiso con preservar la tierra, proteger a la gente y resguardar la patria incluso con los ojos.
A través de un mensaje trasladaron "sublimes bendiciones y felicitaciones" a las familias de los mártires de parte de quienes aguardan en los campos de la lucha, la resistencia, la firmeza y el heroísmo.
Con motivo del Día de los Mártires de Hizbullah, prometieron “adherirse al camino de los mártires, seguir la guía de sus testimonios y llevar a cabo sus metas hasta lograr una clara victoria sobre los enemigos de la religión".
En esta ocasión, querida por todos los combatientes desplegados y en alerta a lo largo de los ejes para enfrentar al enemigo, felicitamos a nuestros justos mártires, continuaron.
Los combatientes agregaron: “Los felicitamos por su elevada posición en las alturas y por su encuentro con el maestro de los mártires de la nación, Sayyed Hassan Nasrallah (que Dios el Altísimo esté complacido con todos ellos) en presencia del Noble Señor (Dios) junto con (el profeta) Muhammad y su pura familia”.
Dirigieron un saludo de paz a las familias de los justos mártires, ya sean padres, madres, hijos, hijas y esposas, y destacaron que los sacrificios de los mártires conducirán a una victoria triunfal con la que la bandera de lucha permanecerá ondeando en alto.
También será un faro que iluminará los caminos de los combatientes y de los oprimidos que anhelan la aparición de nuestro Imam, la Prueba, el Mahdi de la familia de [el profeta] Muhammad (que Dios Todopoderoso acelere su honorable aparición).
Hizbullah conmemora cada 11 de noviembre el Día de los Mártires. Ese día en 1982, el joven mártir Ahmed Kassir irrumpió en la sede del gobernador militar israelí en la ciudad de Tiro y destruyó por completo el edificio; en el acto murieron más de 100 oficiales y soldados de la ocupación.