Ejército de Siria frena a terrorista en Idlib y lanza contraofensiva
Los militares sirios recuperaron el control de la aldea de Jubas y obligaron a los radicales a retirarse de las zonas de Dadij y Kafr Batij, situadas al este de Idlib.
El Ejército de Siria logró detener el avance de las facciones de la llamada Sala de Operaciones Conjunta, liderada por el grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham, al sureste de Idlib, mientras continúan los intensos combates en el eje oeste de Alepo.
Desde el jueves, las fuerzas sirias iniciaron una contraofensiva en los puntos antes perdidos en Idlib y recuperaron el control de la aldea de Jubas y obligaron a los combatientes armados a retirarse de las zonas de Dadij y Kafr Batij.
En estas zonas, los combates estuvieron respaldados por ataques con misiles para evitar que los militantes regresaran.
Los bombardeos se centraron en aldeas al oeste de Alepo y en las líneas de suministro del Monte al-Zawiya, al sur de Idlib donde operan los terroristas de Hayat Tahrir al-Sham con apoyo de inteligencia turca y ucraniana.
Simultáneamente, los enfrentamientos se extendieron en dos frentes en la región rural de Alepo: uno en Anadan y otro en Khan al-Asal, donde los insurgentes intentaron avanzar en ambas direcciones.
En paralelo, la aviación siria atacó con misiles otro cuartel general de la Sala de Operaciones Conjunta en las afueras de la ciudad de Marea, al norte de Alepo, lo que resultó en muertos y heridos entre los militantes.
También, en el frente de Idlib, los grupos armados intentaron abrir un nuevo eje tras fracasar en su avance hacia la autopista internacional M5. Los combates se intensificaron en dirección a Khan al-Sabil, al sur de Idlib, bajo control del ejército sirio.
Por otro lado, Hayat Tahrir al-Sham, en colaboración con las facciones del llamado Ejército Nacional respaldado por Turquía, lanzó en días recientes una agresión a gran escala contra las posiciones del ejército sirio en Idlib y Alepo.
Diversas fuentes señalaron que esa insurgencia empleó armas y equipos nuevos, incluidos drones de origen ucraniano.
El pasado 27 de noviembre, al menos 400 combatientes vinculados al Frente al-Nusra murieron durante un ataque a posiciones del ejército sirio en Idlib y Alepo, informó el vicepresidente del Centro Ruso para la Reconciliación en Siria, Oleg Egnasiook.