Problemas en el Programa Mundial de Alimentos afectan a Sudán
Un informe del Programa Mundial de Alimentos de la Organización de las Naciones Unidas sobre Sudán identificó varios desafíos como la invalidez para ampliar sus operaciones, oportunidades de financiamiento perdidas y dificultades en la lucha contra el fraude.
Graves problemas en la respuesta del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de las Naciones Unidas a la crisis en Sudán obstaculizaron su capacidad para aliviar el hambre en ese país devastado por la guerra y dañaron la reputación entre los donantes, indicó un informe del organismo publicado por Reuters.
El documento identificó varios desafíos, incluidos la invalidez para ampliar sus operaciones, oportunidades de financiamiento perdidas y dificultades en la lucha contra el fraude.
La emisión del texto fue resultado de una evaluación realizada por el equipo de coordinación regional para emergencias del PMA entre julio y agosto pasados, cuyo objetivo era ayudar a expandir los procedimientos de la entidad en Sudán y los países vecinos.
El análisis calificó a Sudán como la mayor emergencia enfrentada por la insitución en la actualidad, el cual lucha por asegurar miles de millones de dólares para zonas críticas de hambre en el mundo y enfrenta también una crisis de confianza con Estados Unidos y otros grandes donantes.
Cientos de personas mueren en Sudán a diario por desnutrición y enfermedades relacionadas con la falta de alimentos.
La reputación del PMA fue afectada y ahora los principales interesados, incluidos los donantes clave, exigieron avances tangibles antes de comprometer nuevos fondos.
De acuerdo con el subdirector ejecutivo del PMA, Carl Skau, la entidad y otras agencias humanitarias no estaban preparadas para la crisis repentina en Sudán y ello impidió actuar de manera eficiente, efectiva y ética.
El reporte interno criticó los objetivos excesivamente optimistas respecto a la distribución de ayuda.
La meta inicial de la oficina del PMA en Sudán de alcanzar a 8,4 millones de personas necesitadas fue irreal.
Según el estudio, el Programa Mundial de Alimentos podría cumplir solo alrededor del 50 por ciento de su plan operativo actual para octubre de 2024.
Los altos costos y una inadecuada planificación resultaron en pagos a ONG, las cuales lograron menos del cinco por ciento de sus objetivos de distribución.