Primer convoy de ayuda llega a Sudán desde el inicio del conflicto
Un total de 28 camiones de ayuda humanitaria y alimentaria llegaron a la zona de Yebel Aulia, al sur de Jartum, por primera vez desde el inicio del conflicto en Sudán.
El primer envío de ayuda desde el inicio del conflicto en Sudán, hace veinte meses, llegó a una zona sitiada al sur de la capital, Jartum, informó un grupo de voluntarios locales.
La Sala de Respuesta a Emergencias, una red de voluntarios que coordina asistencia en las líneas de frente en todo Sudán, anunció que 28 camiones arribaron a la región de Yebel Aulia, al sur de Jartum.
El convoy incluyó 22 camiones con alimentos proporcionados por el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas, un camión de Médicos Sin Fronteras y la organización CARE, además de cinco camiones cargados con medicamentos de UNICEF, la agencia para la infancia de la ONU.
Según la red local y UNICEF, los suministros atenderán las "necesidades urgentes de salud y alimentación de unas 200 mil personas, incluidos niños y sus familias".
La región de Yebel Aulia es una de las muchas áreas de Sudán que enfrenta hambruna generalizada debido a la falta de acceso desde el inicio del conflicto.
Por su parte el representante de UNICEF en Sudán, Sheldon Yett, señaló que el acceso a la zona se vio esencialmente bloqueado por las dinámicas del conflicto. Añadió que lograr la entrega de ayuda requirió tres meses de negociaciones.
En declaraciones a la agencia francesa AFP, Yett explicó que los camiones fueron detenidos varias veces durante el trayecto y los conductores, de manera comprensible, estaban reacios debido a los riesgos involucrados.
Un informe respaldado por la ONU esta semana reveló que al menos cinco regiones de Sudán sufren actualmente hambruna, mientras que la inseguridad alimentaria alcanzó niveles peores de lo previsto.
El Programa Mundial de Alimentos advirtió que algunas áreas de conflicto severo, incluyendo partes de Jartum y del estado de Jazira, podrían experimentar condiciones de hambruna. Sin embargo, la falta de datos oficiales impide clasificar formalmente dichas regiones como tales.