Palestina inicia año nuevo bajo silencio mundial ante su exterminio
El comité ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina acusó al gobierno israelí de perpetrar una masacre contra el pueblo palestino, al atacar a sus mujeres, niños, ancianos, hombres, tierras y lugares sagrados.
El pueblo de Palestina, en especial la Franja de Gaza, inició el año nuevo sumido en el sufrimiento, el desplazamiento, el hambre, la muerte, la destrucción, el genocidio y la limpieza étnica, como resultado de la brutalidad israelí durante más de 14 meses de una guerra de exterminio bajo un silencio y una complicidad internacional vergonzosa.
Según el comunicado emitido por el miembro del comité ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina, Ramzi Khoury, el organismo acusó al gobierno israelí de perpetrar una masacre al atacar a sus mujeres, niños, ancianos, hombres, tierras y lugares sagrados.
Los sionistas destruyeron elementos básicos para la vida, incluida la infraestructura sanitaria, como ocurrió con los hospitales Kamal Adwan, Indonesio, Al-Wafa, Bautista, Al-Awda, entre otros, devastados e incendiados, agregó.
De acuerdo con el comité, “Israel” lleva a cabo una matanza sin precedentes en la historia contra instalaciones médicas dispuestas para salvar vidas.
Khoury confirmó el martirio de mil 68 miembros del personal médico, la detención de cientos de ellos.
Al menos 34 centros de salud quedaron fuera de servicio, 242 puestos asistenciales destruidos y 136 ambulancias arruinadas, unido el bloqueo al acceso a medicamentos y suministros esenciales.
La declaración subrayó la conversión de Gaza en un infierno tras la pérdida de toda su infraestructura y la comisión de alrededor de 10 mil masacres, con un saldo de 57 mil víctimas entre muertos y desaparecidos, la desaparición de mil 413 familias del registro civil, 108 mil heridos y el desplazamiento del 90 por ciento de la población, confinada en condiciones extremas en apenas el 20 por ciento del territorio.
Para el comité, los crímenes israelíes, no solo en Gaza sino en toda Palestina, amenazan con cambiar el orden internacional hacia una ley de la selva.
Además, responsabilizó a las potencias occidentales de permitir el accionar de un Estado fascista y criticó el estatismo de la comunidad internacional frente al crimen.
Ese abandono refleja una postura completamente sesgada a favor del agresor, señaló.
Por otro lado, denunció las violaciones del ejército y los colonos israelíes, el robo de tierra, la expulsión de sus legítimos dueños, la construcción de asentamientos y los ataques terroristas en ciudades, aldeas y campamentos.
Al concluir, instó a la comunidad internacional, sus instituciones, las iglesias del mundo y las personas de conciencia a asumir su responsabilidad legal, política, ética y humana y enfrentar los intentos de “Israel” por borrar la existencia del pueblo palestino y negarle el derecho a un Estado independiente con Jerusalén como su capital.