Ministra de Seguridad argentina aúpa opositores prófugos de Venezuela
Patricia Bullrich recibió en Buenos Aires a Antonio Ledezma y Richard Blanco, ambos buscados por la justicia venezolana.
Los opositores prófugos de Venezuela, Antonio Ledezma y Richard Blanco, ambos imputados por la justicia de su país, se reunieron en Buenos Aires con la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich.
Esa reunión precede a la gira de Edmundo González Urrutia, apoyado por algunos ex presidentes latinoamericanos con antecedentes criminales, que pone de relieve la actual agenda de intervención de la extrema derecha internacional en los asuntos de la nación bolivariana.
González Urrutia, figura política de extrema derecha, tiene previsto visitar Panamá, Uruguay y Argentina en busca de apoyo internacional.
Sin embargo, en una reciente entrevista, el presidente panameño, José Raúl Mulino, distanció a su país de supuestos planes para esa cita en su territorio.
Anteriormente, las autoridades venezolanas emitieron órdenes de detención contra González Urrutia por cargos que incluyen conspiración, complicidad en actos violentos, falsificación de documentos, blanqueo de dinero e incitación a desobedecer las leyes.
La cita en Buenos Aires pone de relieve la activa posición golpista de estas figuras opositoras y el propio gobierno de Javier Milei, en particular de Antonio Ledezma, cuya carrera política abarca décadas de polémicos incidentes en la política venezolana.
Como ex gobernador del Distrito Capital Federal y posteriormente como alcalde metropolitano de Caracas, el mandato de Ledezma estuvo marcado por hechos delictivos, detalló Telesur.
Durante su administración enfrentó graves acusaciones, incluida la implicación en un incidente ocurrido en 1975 en la antigua prisión de Retén de Catia, donde murieron unos 200 reclusos durante una operación conjunta de la Guardia Nacional y la Policía Metropolitana.
A principios de la década de 1990, se caracterizó por enfrentamientos con movimientos estudiantiles, que se saldaron con numerosas detenciones durante protestas en la Universidad Central de Venezuela (UCV).
La actuación política de Ledezma en momentos de la historia reciente de Venezuela resalta en el 2002, cuando apoyó abiertamente el golpe de Estado contra el entonces presidente comandante Hugo Chávez.
Posteriormente participó en el paro petrolero que costó a la nación 21 mil millones de dólares en pérdidas.
Polémico fue su mandato como alcalde metropolitano de Caracas (2008) también por el despido de dos mil 252 trabajadores y la congelación de las pensiones de los jubilados.
Más recientemente, en 2014, Ledezma estuvo implicado en el plan “La Salida” junto a Leopoldo López y María Corina Machado, una serie de protestas que se saldaron con 43 muertos y más de 800 heridos.
En 2015 fue detenido por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) acusado de conspiración antes de huir a Colombia y posteriormente establecerse en España.
Por su parte Richard Blanco, que mantiene una estrecha relación con la ministra Bullrich desde julio de 2024, también enfrenta a cargos penales en Venezuela.
La fiscalía general le acusa de lesiones personales graves e incitación a cometer delitos, sobre todo tras su participación en el fallido levantamiento militar contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro el 30 de abril de 2019.
Posteriormente, Blanco se refugió en la Embajada de Argentina en Caracas durante casi 40 días antes de huir a Colombia.
Coalición de extrema derecha auspicia agenda golpista contra Venezuela
La iniciativa de la extrema derecha continental de promover la gira de González Urrutia incluirá el apoyo de ex presidentes afiliados a la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), una coalición de extrema derecha entrometida con frecuencia en los asuntos internos venezolanos.
El reciente activismo de la coalición salió a la luz durante un incidente ocurrido el 27 de julio de 2024 en el aeropuerto de Panamá, donde los miembros de IDEA intentaron entrar sin autorización a Venezuela para servir como observadores para las elecciones del 28 de julio.
Sin embargo, estos ex mandatarios arrastran señalamientos de sus propias administraciones y muchos enfrentan cargos judiciales por delitos cometidos durante su gestión.
Entre ellos figuran el ecuatoriano Jamil Mahuad (1998-2000), la panameña Mireya Moscoso (1999-2004), su compatriota, Ernesto Pérez-Balladares (1994-1999).
Engrosan la lista, además, el mexicano Felipe Calderón (2006-2012), su predecesor, Vicente Fox, el paraguayo Mario Abdo Benítez (2018-2023), el colombiano Andrés Pastrana (1998-2002).
La implicación de estas personalidades en las actividades de los extremistas venezolanos evidencia la naturaleza del apoyo internacional a los esfuerzos desestabilizadores en torno a la figura de González Urrutia y María Corina Machado.