Declaraciones de enviada de EE. UU. desató protestas en Líbano
Numerosos ciudadanos protestaron contra los intentos de Washington de excluir a la Resistencia libanesa de la próxima formación de gobierno, o de considerarla derrotada por “Israel”.
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Protestas en Líbano por declaraciones de enviada de Estados Unidos (AFP).
Las declaraciones contra la Resistencia (Hizbullah) emitidas por la vicepresidenta de la misión de Estados Unidos para Medio Oriente, Morgan Ortagus, provocaron estallidos de indignación en Líbano.
Numerosos ciudadanos protestaron contra los intentos de Washington de excluir al movimiento de la próxima formación de gobierno, y de considerarlo derrotado por “Israel”.
Los manifestantes se congregaron frente al Aeropuerto Internacional de Beirut para expresar su descontento con las palabras de Ortagus luego de su reunión con el presidente Joseph Aoun en el palacio presidencial.
También bloquearon temporalmente la autopista de la Ciudad Deportiva en dirección al aeropuerto.
Rechazo de líderes políticos
Los criterios de Ortagus generaron condenas de distintos partidos y figuras políticas libanesas, opuestos a cualquier injerencia en los asuntos internos del país y defendieron el papel de Hizbullah en el panorama político.
A su vez, el gran muftí chiíta, sheik Ahmad Qabalan, respondió a la funcionaria estadounidense que los asuntos de Líbano son solo de libaneses y Hizbullah es una fuerza nacional con una representatividad del tamaño del país.
En su opinión, un gobierno sin Hizbullah y el movimiento Amal llevaría al país a lo desconocido, y cometer un error con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, sería una catástrofe de magnitud constitucional.
Asimismo, desmintió las afirmaciones de Ortagus sobre la supuesta derrota de Hizbullah, en tanto los combatientes de la Resistencia no han sido ni serán vencidos, y ninguna fuerza en el mundo podrá eliminarlo.
Por otro lado, el Partido Social Nacionalista Sirio repudió el mensaje de Ortagus porque busca destruir el respaldo árabe e internacional al gobierno del electo Joseph Aoun como presidente y la designación de Nawaf Salam como primer ministro.
En el Encuentro de Partidos y Fuerzas Nacionales de Líbano criticaron la violación de protocolos diplomáticos por parte de Ortagus, pues ningún funcionario extranjero tiene derecho a atacar a Hizbullah ni a vetar su participación en el gobierno.
También la dirección central del Partido Baath Árabe Socialista exigió una respuesta firme del Ministerio de Exteriores libanés, y la inmediata convocatoria a la embajadora estadounidense en Beirut para expresarle la protesta oficial del país.
Por su parte, el jefe del bloque parlamentario Lealtad a la Resistencia, Mohammad Raad, calificó las declaraciones de Ortagus como una interferencia flagrante en la soberanía libanesa, pues actuó con una hostilidad evidente hacia un componente nacional que resistió a la agresión israelí y la derrotó.
La Oficina de Información de la Presidencia libanesa emitió un comunicado para aclarar que las opiniones expresadas por la enviada estadounidense representan su punto de vista, y no comprometen a la presidencia libanesa.
