Las fuerzas de ocupación israelíes incendiaron este jueves varias viviendas y propiedades de civiles en la localidad de Odaisseh, en el distrito de Marjayoun, al sur de Líbano, en un nuevo incumplimiento del alto al fuego.

Según la prensa local, el ejército detonó bombas de gran magnitud en las aldeas de Mais al-Jabal y Hula, mientras los vehículos blindados realizaron intensos movimientos en las zonas.

Excavadoras militares realizaron trabajos de remoción de tierras en las afueras de la zona de Dahira, donde fue observada la instalación de paneles de hormigón y el uso de grúas en el área de la Línea Azul, establecida por la ONU.

Asimismo, en el sur de Aita al-Shaab, cerca de la frontera con Palestina ocupada, los uniformados sionistas demolieron una granja.

En Maroun al-Ras, tropas enemigas abrieron fuego de ametralladora en dirección a las afueras de la ciudad limítrofe de Bint Jbeil.

La aviación sobrevoló a baja altitud la capital Beirut y varias regiones, incluido Monte Líbano, Maten, Chouf y el valle de la Bekaa, donde rompieron la barrera del sonido.

En este contexto, el presidente de Líbano, Joseph Aoun negó los rumores sobre un acuerdo con “Israel” para extender el alto al fuego más allá de la festividad de Eid al-Fitr (fiesta de romper el ayuno).