El secretario general adjunto de la Liga Árabe, embajador Hossam Zaki, reveló la posibilidad de posponer algunos días, por razones logísticas, la cumbre árabe prevista para el 27 de febrero en El Cairo.

Según el directivo, el propósito de este evento al más alto nivel será formular una posición árabe sólida y cohesiva sobre la cuestión palestina en general, y los planes de desplazamiento en particular.

En conversación con los medios egipcios, Zaki valoró el desplazamiento forzoso del pueblo palestino como una idea israelí adoptada por Estados Unidos, lo cual requiere una posición árabe unificada como respuesta.

Cuando la posición árabe esté completa y aprobada en la cumbre de El Cairo, quedará clara la verdadera posición estadounidense sobre la situación en la Franja, subrayó el dirigente.

Zaki cuestionó el objetivo real detrás de la propuesta estadounidese: reubicar a la población la Franja o renegociar el gobierno en Gaza.

En opinión del funionario, el interés palestino exige el "abandono de la escena" del movimiento Hamas, mientras los árabes avanzan en dirección de conformar un gobierno en el enclave con poderes para devolver la situación a la normalidad.

Respecto a la posición de la Autoridad Palestina, Zaki analizó las consecuencias de las prácticas inadecuadas de las autoridades de la ocupación israelí, al privarla de recursos financieros y de capacidades básicas para mantener la seguridad.

Por otra parte, durante la recepción ofrecida por el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, al príncipe heredero de Jordania Hussein bin Abdullah II el domingo, este último destacó el apoyo de su país a los esfuerzos egipcios por desarrollar un plan adecuado para la reconstrucción de Gaza sin desplazar presencia de los palestinos en sus tierras.

También resaltó el apoyo de Jordania a la cumbre árabe de emergencia convocada por Egipto para discutir la cuestión palestina y la necesidad de que su resultado sea un consenso árabe sobre este asunto.