EE. UU. intensifica ataques contra Guardianes de la Religión en Siria
La coalición liderada por Estados Unidos continúa con ataques selectivos contra antiguos líderes del grupo radical Hurras al-Din (Guardianes de la Religión) en Siria, a pesar de su disolución en enero.
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EE. UU. continúa persiguiendo a la organización "Guardianes de la Religión" en Idlib
La coalición liderada por Estados Unidos continúa con sus ataques selectivos contra líderes y miembros de la organización Hurras al-Din (Guardianes de la Religión), a pesar del anuncio de la disolución del grupo el 28 de enero.
Guardianes de la Religión, una organización salafista yihadista armada, surgió en febrero de 2018 tras escindirse Hay'at Tahrir al-Sham (HTS). Se consideraba una rama moderna de Al Qaeda en Medio Oriente, compuesta por unas 32 facciones que juraron lealtad tras desertar de HTS.
Desde la caída del régimen de Bashar al-Assad el 8 de diciembre de 2024, la organización anunció su disolución, pero la inteligencia estadounidense a través de aviones de la coalición MQ-9 llevó a cabo una serie de redadas contra sus líderes.
La primera redada, del 30 de enero, tuvo como objetivo al destacado dirigente Mohammad Salah al-Zubair mientras viajaba en su coche por una vía pública cerca de Sarmada, al norte de Idlib.
En la segunda operación, un vehículo fue alcanzado por un ataque en la carretera Orem al-Jawz, al sur de Idlib, y murieron tres altos mandos militares: Abu Bakr Mork, Abu Abdul Rahman al-Libi y Fadlallah al-Libi.
Los tres desempeñaron un papel importante en el reclutamiento de combatientes de varios países para luchar en las filas de los Guardianes de la Religión en Siria.
Durante la tercera incursión, un dron atacó el pasado viernes con un misil guiado un jeep en el que viajaba el líder Wassim Birqadar, conocido como “Talha Abu Imran al-Shami”.
Birqadar era hermano del actual director de Dotaciones de Damasco, Samer Birqadar, y ocupaba el cargo de oficial de seguridad interna de la organización.
Tras el anuncio de la caída del régimen de al-Assad, los drones de vigilancia estadounidenses intensificaron sus operaciones sobre Idlib en medio de temores de que los combatientes y líderes de Hurras al-Din puedan trasladarse a otros países, extendiendo su influencia más allá de Siria.
