Estados Unidos celebró este miércoles el  acuerdo anunciado recientemente entre las autoridades provisionales de Damasco y las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), destinado a integrar el noreste del país y conformar una nación unificada.

Según comunicó el secretario de Estado, Marco Rubio, Washington apoya la transición política, la cual demuestra que un gobierno confiable y no sectario es el mejor camino para evitar más conflicto en Siria.

Rubio añadió que Estados Unidos mantendrá el monitorio a las decisiones adoptadas por las autoridades sirias provisionales y expresó su preocupación por los recientes actos de violencia sangrienta contra las minorías.

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Previamente, el portavoz de las FDS, Farhad Shami, confirmó que el  acuerdo con el gobierno sirio es preliminar y se alcanzó mediante mediación estadounidense, los cuales constituyen una parte clave en este pacto. 

Dos días atrás, la presidencia de transición en Siria anunció el convenio para integrar a las FDS en las instituciones del Estado.

Según añadió, los comités ejecutivos trabajarán en su implementación antes de que finalice el año.

Este acuerdo incluye disposiciones dirigidas a abordar temas fundamentales para garantizar los derechos de todos los ciudadanos sirios y preservar la unidad del país.