Estados Unidos lanzó en la noche del lunes nueve ataques aéreos sobre la gobernación de Saada en el norte de Yemen y dejó un saldo de varios heridos, informó el corresponsal de Al Mayadeen.

La más reciente agresión ocurre un día después de que Washington realizara seis bombardeos aéreos contra las cercanías de la ciudad de Saada y los distritos de Saqeen y Sahar, en la misma provincia.

El ataque estadounidense también alcanzó el domingo un edificio en una zona residencial del barrio de Aser, en el distrito de Maain, al oeste de Saná, con un saldo de un mártir y 13 heridos, entre ellos tres niños.

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Durante la tarde de este lunes, las sirenas de alerta sonaron en las áreas del centro de "Israel" y Jerusalén tras el lanzamiento de un misil desde Yemen, según medios de la entidad.

Estas agresiones de Washington contra Yemen forman parte del apoyo continuo a "Tel Aviv" y buscan presionar a las autoridades de Saná para que abandonen su postura de respaldo y solidaridad con la Franja de Gaza.

Atacar objetivos civiles en Yemen es un crimen de guerra

La Oficina de Derechos Humanos de Saada condenó los ataques aéreos de Estados Unidos contra el edificio del Centro de Tratamiento Oncológico en la gobernación, que provocaron víctimas humanas y daños importantes a la infraestructura. 

De acuerdo con la autoridad, "la agresión dirigida contra objetivos civiles es un acto criminal, un crimen de guerra en toda regla y una violación del derecho internacional".

Consideró "plenamente responsables a Estados Unidos y a todos los países participantes en la agresión", y pidió a la comunidad internacional y organizaciones humanitarias poner fin a estas acciones criminales y remitir a los culpables a los tribunales competentes.