EE.UU. sanciona a empresas de Irán y China por programa de misiles
El Departamento del Tesoro de EE.UU. sancionó a compañías iraníes y chinas por enviar insumos químicos estratégicos vinculados al desarrollo de misiles balísticos.
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EE.UU. sanciona a empresas de Irán y China por programa de misiles
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones a seis empresas y seis personas en Irán y China por presuntamente transferir componentes químicos utilizados en la fabricación de misiles balísticos enmarcado en los esfuerzos de Washington por frenar el desarrollo del programa militar iraní.
"Para lograr la paz a través de la fuerza, el Tesoro seguirá tomando todas las medidas disponibles para privar a Irán del acceso a los recursos necesarios para avanzar en su programa de misiles", dijo el secretario del Tesoro, Scott Bessent.
Según el comunicado oficial, las compañías implicadas habrían facilitado el envío de perclorato de sodio y sebacato de dioctilo, sustancias empleadas en la elaboración de misiles de combustible sólido. El perclorato de sodio, precursor del perclorato de amonio, figura en la lista del Régimen de Control de Tecnología de Misiles (RCTM) por su potencial uso en armamento de largo alcance.
Dentro de los señalados figuran la compañía Saman Tejarat Barman Trading Company (STB), con sede en Irán, y su representante Mohammad Asgari, quienes habrían coordinado los envíos mediante la firma Shenzhen Amor Logistics Co. Ltd., radicada en China. El Tesoro identificó esta red como una de las principales rutas de suministro de componentes estratégicos hacia territorio iraní.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, instó a Europa a considerar la reimposición de sanciones a Irán, advirtiendo que Teherán está "peligrosamente cerca de un arma, más cerca que nunca".
— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es) April 19, 2025
Hablando desde París tras las conversaciones con líderes europeos, Rubio… pic.twitter.com/jYaU5W7Bwj
La acción se suma a una serie de medidas unilaterales adoptadas por Estados Unidos para presionar al gobierno iraní sobre sus actividades balísticas, al margen del acuerdo nuclear abandonado por Washington en 2018.
A través de restricciones económicas, Estados Unidos busca limitar sus capacidades militares, particularmente en desarrollo nuclear y misiles.