El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, reiteró la necesidad de que el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) cumpla con su compromiso de disolverse y entregar las armas, en línea con el llamado de su líder, Abdullah Öcalan, emitido en marzo pasado.

Durante declaraciones a los periodistas en el vuelo de regreso desde Tirana, donde participó en la sexta cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE), Erdogan afirmó que una Turquía libre de terrorismo abrirá la puerta a una nueva etapa nacional e internacional.

“Con el terrorismo completamente eliminado de la agenda de Turquía, se abrirá la puerta a una era completamente nueva”, dijo el mandatario. 

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Erdogan también confirmó que Ankara mantiene diálogo con países vecinos para abordar la entrega de armas por parte de los miembros del PKK que operan fuera del territorio turco, especialmente en norte de Irak y regiones del noreste sirio, donde el grupo mantiene presencia activa.

 

 

 

 

 

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Respuesta del PKK al llamado de Öcalan

Hace unos días, el PKK anunció su decisión de disolverse y desarmarse, como respuesta al histórico llamado de su líder encarcelado, Abdullah Öcalan, quien instó al movimiento a deponer las armas como un paso hacia una solución política del conflicto kurdo.

Poco después, medios turcos informaron que el PKK declaró un alto el fuego unilateral, en lo que se interpretó como una señal positiva para avanzar en un proceso de desmovilización total, aunque las autoridades turcas exigen pasos concretos e irreversibles.