Sequía histórica reduce cosechas de trigo en Siria
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Al Mayadeen Español
- Hoy 10:22
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El colapso del trigo por falta de lluvias profundiza la crisis alimentaria y obliga al país a depender de importaciones.
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Sequía sin precedentes en Siria amenaza cultivo de trigo.
Una sequía sin precedentes en más de seis décadas arrasó con el 75 por ciento de los cultivos de trigo en Siria, y dejó al borde de la inseguridad alimentaria a más de 16 millones de personas y más de 2,5 millones de hectáreas afectadas. .
Según el informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la drástica caída en la producción golpea tanto a las zonas bajo control del gobierno como a las administradas por la autoridad kurda, las cuales compiten por adquirir las cosechas escasas mediante incentivos a los agricultores.
La representante adjunta de la FAO en Siria, Haya Abu Asaf, notificó este ciclo agrícola como el peor en 60 años, con un daño del 95 por ciento del trigo de secano y una caída del rendimiento irrigado de hasta el 40.
Además, las consecuencias agravaron una economía ya golpeada por 14 años de conflicto, sanciones y deterioro estructural.
Naciones Unidas publicó una evaluación que muestra que no más del 5% de las tierras agrícolas de Gaza pueden cultivarse debido a los daños y las restricciones de movimiento dentro de la Franja.
— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es) May 27, 2025
El diagnóstico, elaborado por la FAO en colaboración con el Centro de Satélites de… pic.twitter.com/3uqvbZK8tr
Caída en la producción obliga a importaciones
Antes de la guerra en 2011, Siria producía 4,1 millones de toneladas de trigo por año. Desde entonces, el país depende de importaciones rusas, mientras su capacidad agrícola quedó reducida.
Este año, el Ministerio de Agricultura estimó una cosecha de entre 300 mil y 350 mil toneladas, lejos del mínimo necesario.
De acuerdo con el director de la Empresa Pública de Cereales, Hassan Othman, esperan adquirir unas 250 mil toneladas.
Los últimos envíos llegaron desde Rusia y Irak, con una donación de 220 mil toneladas al pueblo sirio. Un barco atracó en Latakia en diciembre y otro en Tartús el mes pasado.
Competencia interna por el trigo escaso
Frente al colapso agrícola, el gobierno y la administración kurda ofrecieron bonificaciones para asegurar la compra del trigo local.
El Ministerio de Economía fijó el precio entre 290 y 320 dólares por tonelada, con una bonificación adicional de 130 dólares aprobada por decreto presidencial.
Por su parte, la administración autónoma kurda estableció un precio de 420 dólares, incluido un subsidio directo de 70 dólares para fortalecer la producción en el norte y noreste del país.
El año pasado, el gobierno ofreció 350 dólares por tonelada, mientras la autoridad kurda pagaba 310 dólares.
A su vez, el nuevo reajuste coincide con la sequía devastadora, según coinciden expertos y funcionarios locales.
Desesperación en el campo y crisis de agua subterránea
En Amuda, en el noreste del país, la falta de lluvias obligó a los agricultores a profundizar los pozos hasta 160 metros, pero el rendimiento fue muy bajo.
Conforme a la FAO, el nivel freático descendió notablemente, lo cual constituye un indicador alarmante. Los efectos también impactaron los pastizales y el sector ganadero.
Crisis prolongada y la emergencia sanitaria
La prolongación del conflicto, las sanciones internacionales y el cambio climático intensificaron el colapso del sector agrícola y profundizaron la emergencia alimentaria.
Mientras tanto, la población siria enfrenta un futuro marcado por la pobreza rural, la falta de agua y la dependencia externa.
