El jefe del Consejo Político Supremo de Yemen, Mahdi al-Mashat, confirmó este miércoles el fracaso de la reciente agresión israelí contra su país y prometió represalias.

Durante declaraciones a la agencia estatal Saba, al-Mashat advirtió que “todos los israelíes deben mantenerse preparados, ya que la respuesta es inevitable”.

También enfatizó que la reciente agresión "nos brindará una mayor oportunidad para responder con todas nuestras fuerzas".

Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores del gobierno de Saná denunció que atacar objetivos civiles constituye una “flagrante violación del derecho internacional y humanitario”.

La cartera diplomática afirmó que la entidad de ocupación "pagará un alto precio por su continua agresión", al tiempo que elogió la actuación de las fuerzas de defensa aérea yemenitas.

Asimismo, reiteró el compromiso de Yemen con la causa palestina, asegurando que la agresión “solo reforzará la determinación del pueblo de apoyar a Gaza”.

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"Israel" lanzó este miércoles una nueva agresión aérea contra Yemen, impactando la capital Saná y la gobernación de Al-Jawf. El ataque causó decenas de muertos y heridos, incluidos periodistas.

Los bombardeos alcanzaron el complejo gubernamental ubicado en el distrito de Al-Hazm, así como un puesto médico del sector salud en la calle Al-Sitteen, al suroeste de la capital.

También apuntaron contra la sede del Departamento de Orientación Moral, adscrito al Ministerio de Defensa, en el barrio de Al-Tahrir, en el centro de Saná, y de los periódicos 26 de Septiembre y Al-Yaman, en el mismo barrio.

El portavoz de las Fuerzas Armadas de Yemen, general de brigada Yahya Saree, informó que las defensas aéreas del país lograron lanzar varios misiles tierra-aire en respuesta a la agresión sionista.

Según detalló en redes sociales, algunas formaciones de combate israelíes se retiraron antes de ejecutar por completo la operación, lo que permitió frustrar gran parte del ataque.

Además, negó alegatos de la ocupación de atacar plataformas de lanzamisiles yemenitas y subrayó que dichas incursiones apuntaron exclusivamente a objetivos civiles.