El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ofreció este lunes un balance sobre las Asambleas Populares realizadas los días 8 y 9 de noviembre, en el marco del proceso de conformación de los Comités Bolivarianos de Base Integral (CBBI), destacando una participación masiva del pueblo.

Durante su intervención desde la sede del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en Caracas, el mandatario informó que más de tres millones de personas participaron en 145 mil 465 asambleas de calle en todo el país.

Maduro anunció que las asambleas continuarán los días martes, miércoles y jueves de esta semana, así como el próximo fin de semana, 15 y 16 de noviembre, a los fines de abarcar a 264 mil calles en el territorio nacional.

Legado revolucionario y fortalecimiento del Poder Popular

El jefe de Estado aprovechó la ocasión para reflexionar sobre los principios fundacionales de la Revolución Bolivariana, inspirados en el legado del Comandante Hugo Chávez, Aristóbulo Istúriz y Darío Vivas.

También reiteró la necesidad de romper con prácticas capitalistas como el caudillismo y la corrupción, transformar al PSUV en un partido-movimiento al servicio de las luchas del pueblo y fortalecerlo como medio de propaganda y comunicación para avanzar frente a la guerra cognitiva.

Acompañado por la primera combatiente, Cilia Flores; el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello; y miembros de la Juventud del PSUV, el presidente reafirmó que ante cada escalada imperialista, el pueblo responde con más Revolución, más conciencia y más organización.

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Organización para la paz y la defensa integral

Maduro destacó que este proceso de organización popular, que se viene gestando desde hace siete años, tiene como objetivo garantizar la paz, la estabilidad y la defensa integral de la nación frente a amenazas externas.

Afirmó que el Poder Popular resulta clave para las victorias electorales, sociales y económicas de la Revolución Bolivariana, consolidando la participación ciudadana como eje fundamental del proyecto político.

También recordó el papel fundamental de los jefes de calle en la derrota del intento de imposición de Juan Guaidó como presidente, resaltando que “el pueblo en la base, en las calles, derrotó al guaidocismo y a sus patrocinadores imperiales”.

El jefe de Estado expresó que el PSUV y la Revolución lograron el más alto nivel de maduración y sabiduría para fortalecer sus bases y estar en mejores condiciones para ganar la paz y avanzar en el proceso de recuperación económica, social y cultural del país.

A criterio del mandatario nacional, este nivel organizativo del PSUV también derrotará y frustrará las amenazas imperiales que pretenden "clavar sus garras coloniales sobre Venezuela, Colombia, Suramérica y todo el Caribe".

Maduro cuestiona a la extrema derecha

Maduro lanzó una contundente crítica contra los sectores de la extrema derecha venezolana: “¿Tiene esa derecha liderazgo, poder, fuerza y capacidad para tomar el poder político de Venezuela y llevarla en paz?”, preguntó.

Tras cuestionar su falta de propuestas y desconexión con la realidad nacional, aseguró: “Esa derecha maltrecha desapareció del escenario político nacional; solo les queda amamantar las amenazas de la bestia imperialista del norte. No existe en la realidad social”.

En ese sentido, denunció que estos grupos sobreviven únicamente gracias al financiamiento extranjero: “Solamente sobreviven de los dólares sucios y llenos de sangre del imperialismo para que mantengan una amenaza permanente”.

"La extrema derecha sayonista y criminal es la nada en el escenario nacional. Es la nada hoy y será la nada mañana, la nada para siempre, tenemos que garantizar que jamás vuelva a resurgir”, reiteró el mandatario venezolano.

Finalmente, celebró que la Revolución “tiene solidez propia y fuerza de verdad porque gobierna, controla y dirige este país que se llama Venezuela”, reafirmando la ruta de consolidación del proyecto Bolivariano, basado en la organización popular, la soberanía nacional y la defensa de la paz.