La privación de sueño, incluso por una sola noche, altera el sistema inmunitario, e incrementa el riesgo de obesidad, diabetes y enfermedades cardíacas.

Este resultado procedió de una investigación del Dasman Diabetes Institute sobre el impacto del trastorno en células inmunitarias circulantes, como los monocitos, y su relación con la inflamación sistémica crónica.

Para comprender mejor esta relación, los científicos analizaron los patrones de 237 personas sanas, y las dividieron en grupos según su índice de masa corporal.

A partir de muestras de sangre, midieron los niveles de distintos subconjuntos de monocitos (clásicos, no clásicos e intermedios).

Como parte del estudio, llevaron a cabo un experimento de control en el que privaron del descanso a cinco personas sanas y delgadas durante 24 horas.

Luego, compararon las muestras de sangre tomadas durante y después de ese período para analizar los cambios.

Dichos resultados revelaron que, incluso ocho horas sin dormir, alteraron los perfiles tantos en personas delgadas como obesas. 

Ahora, los autores planearon explorar los mecanismos que vincularon ese fenómeno con los cambios inmunológicos, y determinar si es posible revertir estas alteraciones.