La nave Starship 36 sufrió una explosión durante una prueba de fuego estático en las instalaciones de SpaceX en Starbase, Texas.

El incidente ocurrió al realizarse los preparativos finales para lo que sería el décimo vuelo de prueba de la Starship, programado originalmente para finales del mes actual.

Imágenes captadas en el lugar mostraron el momento preciso en que el equipo, posicionado en su plataforma de lanzamiento, estalló violentamente tras el encendido de sus motores, y quedó completamente envuelto en llamas.

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SpaceX emitió un comunicado oficial describiendo el suceso como una "anomalía grave", aunque aseguró que todo el personal involucrado se encontraba a salvo y debidamente contabilizado.

La compañía espacial hizo especial énfasis en que el incidente no representaba ningún riesgo para los residentes de las comunidades aledañas, al mismo tiempo que solicitó expresamente al público en general evitar acercarse a la zona mientras se llevaban a cabo las operaciones de seguridad. 

Ciudad para SpaceX

Los residentes del sur de Texas aprobaron en mayo la creación de Starbase, la ciudad dedicada a las operaciones de SpaceX en el sur de Texas. 

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Durante su noveno vuelo de prueba realizado en mayo, la nave también sufrió lo que la compañía describió técnicamente como un "desmontaje rápido no planificado", y se desintegró en la atmósfera.

Starship mide 120 metros de altura y produce 74,3 meganewtons de empuje, más del doble que los cohetes Saturn V utilizados para enviar a los astronautas del programa Apolo a la Luna.