El planeta se reúne en Egipto
Nuestra única nave espacial, como afirma Walter Martínez, hace una parada en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheij para celebrar la Conferencia de las Naciones Unidas COP27.
Nuestra única nave espacial, como afirma Walter Martínez, hace una parada en la ciudad egipcia de Sharm el-Sheij para celebrar la Conferencia de las Naciones Unidas COP27. Allí tratarán los temas relacionados con el Cambio Climático en su edición 2022.
El desarrollo desenfrenado de los procesos industriales en el Planeta, el afán de producir y ganar más en medio de un mercado cada vez más salvaje y elitesco que no repara para nada ante la destrucción de la capa de ozono por la emisión de carbono y otras inmundicias que destruyen la vida.
En la tierra de los faraones, los líderes mundiales volverán nuevamente a tratar el tema del agua potable que se agota, de la producción de alimentos que escasean ante la hambruna mundial que como tormenta, avanza de manera inexorable. Para el año 2050 se estima, seremos 9.000 millones de habitantes pujando por un vaso de agua y un mendrugo de pan. Al ritmo que vamos, la gran tragedia bíblica del Apocalipsis con sus ángeles de trompetas y de monstruos vomitando azufre, continuará avanzando.
Urge abandonar las emisiones de carbono y de las otras inmundicias que acortan la vida, que entorpecen la producción agrícola, que influye en la biodiversidad y que amenaza con llevárselo todo como ya ocurrió una vez cuando los dinosaurios se extinguieron. Urge crear un Planeta resilente que pueda autosostenerse.
En Egipto estará presente lo real maravilloso de este Continente latinoamericano y caribeño a través del Alba y el Caricom. Allí, el presidente venezolano Nicolás Maduro hará sentir con fuerza nuestra voz, la de más de 500 millones de seres humanos que anhelan cuidar la Amazonia, nuestros ríos caudalosos, nuestros mares, esta fauna y flora donde se concentra el destino de la humanidad. Un mundo energético descarbonizado, como lo ha demandado el presidente Gustavo Petro, ha de ser uno de los compromisos de la Conferencia. Nuestro Planeta es débil, vulnerable, finito. Por ello se ha de acompañar la propuesta de Bolivia de no mercantilizar a la naturaleza. La degradación ambiental debe detenerse. La Tierra es nuestro hogar, no lo olvide nunca jamás.
Táchira, San Cristóbal, noviembre 2022.