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"Israel" lanzó una agresión contra la República Islámica de Irán en la madrugada del viernes 13 de junio, contra instalaciones nucleares y líderes militares. Irán respondió con el lanzamiento de cientos de drones y misiles como parte de su Operación "Promesa Veraz 3".
Abbas Araghchi acusó a “Israel” de atacar instalaciones nucleares pacíficas y llamó a la OCI y comunidad internacional a pronunciarse de forma contundente.
Teherán acusó a Rafael Grossi ante la ONU de incumplir sus deberes en la AIEA, tras omitir condena a ataques israelíes contra instalaciones nucleares iraníes.
Como respuesta al ataque, las defensas aéreas iraníes interceptaron objetivos en varias partes del país persa.
Las defensas aéreas iraníes siguen interceptando objetivos israelíes en todo el país, paralelamente a la represión de la agresión, Irán continúa su campaña de seguridad arrestando a agentes del Mossad.
El Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos denunció que "Israel" cruzó una línea roja al bombardear Teherán y exigió movilización mundial por Palestina e Irán.
Los ministros de Asuntos Exteriores árabes condenan la agresión de "Israel" contra Irán y pidieron una acción internacional eficaz e influyente para detener las acciones y políticas agresivas de la ocupación.
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán subraya que las recientes acciones de la administración Trump constituyen una "traición a la diplomacia" y pregunta cómo se puede seguir confiando en ella.
Misiles iraníes impactan "Tel Aviv" y Holón; suenan sirenas desde Netanya hasta Ashdod.
El embajador de Irán en España, Reza Zabib, lanzó una advertencia directa a Estados Unidos: si disparan "una sola bala", sus bases militares serán un objetivo legítimo.
Continuar la guerra a este ritmo no favorece los objetivos de Trump ni de Netanyahu, sino que agrava la situación. Este problema solo puede resolverse mediante la intervención directa de Estados Unidos en la guerra, algo que los líderes de la entidad sionista han exigido públicamente.