Las partes yemenitas llegaron a un acuerdo para avanzar en la implementación del Acuerdo de Estocolmo por medio de conversaciones dirigidas por la ONU, que se están realizando a bordo de un barco anclado en el puerto de Hodeidah.

El portavoz del Secretario General de Naciones Unidas, Stephan Dujarric, dijo que las partes habían trabajado juntas de manera constructiva para separar fuerzas y abrir corredores humanitarios, pero los desafíos continúan debido a la naturaleza compleja de los frentes de confrontación.

Dujarric agregó que para resolver este proplema, el Presidente de la Cruz Roja Internacional ofreció una propuesta que recibió aprobación por ambas partes para avanzar en la implementación del acuerdo de Hodeidah.

Además, añadió Dujarric, se había logrado un arreglo temporal  tras llevar a cabo nuevas consultas la próxima semana… Se espera que el General de División, Michael Lawlisgaard, celebre una reunión de la Comisión Conjunta, cuyo objetivo será decidir sobre los detalles del redespliegue de las fuerzas.

“Ambas partes se han mostrado dispuestas a reforzar el alto el fuego provisional”, declaró  el portavoz del Secretario General de la ONU.

El presidente del Comité Supremo Revolucionario yemenita, Muhammad Ali al-Houthi, anunció en Twitter que la delegación de Saná presentó al enviado de la ONU, después de regresar de Suecia, varias propuestas para estabilizar el alto el fuego y el redespliegue, y firmarlo por ambas partes.

Según Al-Houthi, la delegación de Saná se sorprendió por los diálogos políticos que se realizaron en lugar de implementar el acuerdo de Estocolmo.

Asimismo, legisladores demócratas y republicanos, incluido el presidente del Comité Judicial del Senado de los Estados Unidos, Lindsey Graham, presentaron un proyecto de ley para responsabilizar a Arabia Saudita por su guerra contra Yemen.

Esto se produce con el vencimiento de la fecha límite de la administración de los EE.UU. establecida  para proporcionar evidencias físicas del cumplimiento por parte de Arabia Saudita de las exigencias de EE.UU. relativas al uso de sus armas, incluido el abastecimiento de combustible para los aviones.

Sobre el terreno, el portavoz de las fuerzas armadas de Yemen, Yahya Sari, anunció que la coalición saudita ha sufrido pérdidas humanas y materiales significativas durante una operación ofensiva del ejército yemenita y los Comités Populares, que lograron controlar una gran cantidad de posiciones de la coalición y hacerse con diversos equipos militares al sur del monte fronterizo de al-Nar, ubicado  entre el distrito fronterizo de Harad, en la provincia de Hajjah, y el área de al-Tawal en Jizan, Arabia Saudita.

Las defensas aéreas del ejército y los comités derribaron  un avión de reconocimiento de la alianza en el valle fronterizo de Yara en Jizan. Mientras un soldado saudita y cinco miembros de las fuerzas del presidente Abed Rabbu Mansour Hadi fueron abatidos por el fuego de francotiradores del ejército yemenita en la Torre Burqa y al este del monte  al-Dod, en Jizan.

El Ejército y Ansar Allah lanzaron un misil tipo el "Zelzal 1" y  proyectiles de artillería contra posiciones de las fuerzas de Hadi y la alianza saudita en el puerto fronterizo de Ulab, situado entre la provincia yemenita de Saada y Najran, en  Arabia Saudita.

Por su parte, aviones de combate de la coalición lanzaron  una serie de ataques aéreos en el área de al-Atafin, en el distrito de Kataf, en la provincia de Saada en el norte de Yemen. También bombardearon  el  área de Masoura  en en distrito de Nahem, en las afueras del noreste de la capital, Saná.

Cabe señalar que el Reino de Marruecos se retiró de la coalición liderada por los sauditas contra Yemen, según declaró del funcionario del gobierno marroquí.

El funcionario dijo el jueves que su país no participaría en intervenciones militares o reuniones ministeriales en el marco de la coalición liderada por Arabia Saudita.