Los investigadores que se ocupan del incendio, uno de los más mortíferos en Rusia desde la desintegración de la Unión Soviética, dijeron que las salidas de emergencia en el centro comercial habían sido bloqueadas ilegalmente y que el sistema de alarma contra incendios no había funcionado correctamente.

El fuego llegó a las plantas superiores del centro comercial “Winter Cherry” situado en la ciudad de Kemerovo, donde se encuentra un complejo de cines y una zona de juegos para niños, el domingo por la tarde.

Se temía que decenas de niños estuvieran entre los muertos en la tragedia de Kemerovo, una región productora de carbón a unos 3.600 km al este de Moscú. Además del dolor, el fuego ha provocado el enfado de la población a causa de aparentes fallos en los estándares de seguridad contra incendios en el centro comercial.

Putin, reelegido el pasado fin de semana, llegó a la escena del incendio el martes y puso flores en un monumento improvisado a las víctimas.

“¿Qué está pasando aquí? Esto no es una guerra, no es un estallido espontáneo de metano. La gente vino a relajarse, niños”, dijo el mandatario en una reunión con ministros en Kemerovo.

El jefe de la Comisión de Investigaciones de Rusia, que se ocupa de crímenes importantes, dijo que el sistema de alarma contra incendios del centro comercial no funcionaba desde el 19 de marzo y que un guardia de seguridad no activó el sistema de megafonía cuando el fuego comenzó a advertir a las personas de la necesidad de evacuar el edificio.

La comisión dijo anteriormente que estaba intentando contactar con el dueño del centro comercial para que fuera interrogado.

“Graves violaciones (de la ley) tuvieron lugar cuando el centro comercial se estaba construyendo y cuando estaba en funcionamiento. Las salidas de emergencia fueron bloqueadas”, dijo Svetlana Petrenko, una portavoz de la comisión, en un comunicado el lunes.

Cuatro personas ya habían sido detenidas, incluidos dos empleados de la empresa de servicios de alarma contra incendios del centro comercial.

Los servicios de emergencia dijeron que habían extinguido el fuego, pero más tarde informaron que se había reactivado en algunos lugares y que se luchó por recuperar los cuerpos ante el derrumbamiento de la última planta. No estaba claro si todavía alguien no estaba identificado.

La ministra de Sanidad, Veronika Skvortsova, dijo desde la escena que 13 personas estaban en el hospital, incluido un niño de 11 años en estado grave. La prensa rusa dijo que el niño había saltado por una ventana y que sus dos padres habían fallecido.

Muchas de las víctimas solo podrán ser identificadas mediante pruebas de ADN, dijeron las autoridades.