Al-Assad: Bloqueo impuesto a Siria desempeña un papel complementario a las matanzas cometidas por los terroristas
El presidente sirio, Bashar Al-Assad, afirmó que el embargo impuesto por Occidente y Europa contra Siria es considerado complementario de la destrucción y el asesinato perpetrado por los terroristas, hecho que ha impulsado a las personas a abandonar su país a otros lugares, como Europa.

Durante una entrevista concedida a los medios de prensa occidentales, Al-Assad dijo que la prioridad del pueblo sirio es luchar contra el terrorismo, y agregó que es un lujo hablar de política mientras se puede perder la vida en cualquier momento en ataques terroristas¨.
Señaló que erradicar el extremismo es una prioridad, y la reconciliación política en las diferentes áreas, es otra prioridad. "Cuando se logre estos dos objetivos, entonces puedes hablar de lo que quieras con respecto a cualquier tema”, dijo.
Al referirse a los ataques terroristas de días recientes en Damasco, el mandatario dijo que mientras haya terroristas en Siria, cada ciudadano sirio está en peligro, sin duda. Pero, ¿quién apoya a esos terroristas?, preguntó.
Seguidamente, apuntó que esa pregunta me gustaría dirigirla a los funcionarios europeos "que se tomaron en el camino equivocado desde el comienzo de la crisis en Siria, lo que llevó a la destrucción de Siria y la propagación del terrorismo en la región, que a su vez condujo a ataques terroristas en muchos países europeos y creó la crisis de refugiados allí.
Enfatizó que el único papel occidental es apoyar a los terroristas y "lo siguen haciendo hasta el momento", añadió.
Subrayó que el papel de Irán es completamente diferente. "Ellos apoyan a Siria en la lucha contra los terroristas y políticamente, tanto en los foros regionales como internacionales. Israel, por otro lado, apoya directamente a los terroristas, ya sea logísticamente o a través de ataques aéreos directos contra nuestro ejército en zonas fronterizas", argumentó.
Al Assad destacó el apoyo de los rusos en la contienda antiterrorista en Siria, que junto al ejército sirio combaten a los terroristas, y han logrado de conjunto la liberación de Alepo y Palmira.
Para los que piden su abdicación para conseguir la paz, Al-Assad dijo que será el pueblo sirio quien decidirá su futuro, no las Naciones Unidas ni su Consejo de Seguridad. "Sólo escucho al pueblo sirio, no me importa lo que dice la ONU o cualquier otro funcionario extranjero. Creo que cuando se habla de refugiados y asesinatos, debemos tener en cuenta que parte de esos asesinatos fue a mano de los europeos, no directamente, sino a través de su apoyo a los terroristas que hasta el momento los llaman “moderados”, y saben que esto es una ilusión, no hay armados moderados en Siria, todos son extremistas".
Con respecto a los refugiados sirios dijo que no todos abandonaron su país a causa de los atentados terroristas o la destrucción, muchos de ellos -apuntó- partieron debido al embargo europeo u occidental, considerado complementario de la destrucción y el asesinato perpetrado por los terroristas, hecho que ha impulsado a las personas a abandonar su país a otros lugares, como Europa.
En otro momento de la entrevista, Al Assad enfatizó que el deber del gobierno sirio y de cada funcionario sirio es defender su país. "Si no hubiésemos defendido el país, entonces debemos sentirnos culpable, y arrepentidos, pero ¿cómo podría arrepentirse por defender su país?
En torno al diálogo intersirio señaló que desde el punto de vista del gobierno es importante dialogar con todos los sirios, incluidos los armados. "Esto es algo muy abierto porque ningún país o gobierno puede decir que va a hablar con terroristas, pero en nuestro caso, dijimos que vamos a dialogar con los terroristas para poner fin al derramamiento de sangre. Entonces, ¿cómo podemos arrepentirnos del diálogo y de ser abiertos?".
Indicó que esa misma pregunta debe hacerse a los funcionarios occidentales: "¿Se arrepienten de apoyar a los terroristas en Siria y se arrepienten de llamarlos moderados y decir que las manifestaciones eran pacíficas?"
"La guerra en sí misma es una lección muy dura para cualquier sociedad, por tanto cualquier país después de la guerra debería ser mucho mejor, porque aprende lecciones. Cuando la guerra proviene del exterior y usan agentes sirios junto a extranjeros, no basta con culpar a los demás, o culpar a Occidente o los estados petrodólares que apoyan a esos terroristas, al final tienes que mirarte a ti mismo y decir “¿qué pasa con mi país?” No estoy hablando de mí como presidente, estoy hablando como un ciudadano sirio", agregó.
Al Assad sostuvo que su prioridad es abrir y facilitar el diálogo entre los sirios, porque se trata de una discusión nacional sobre cuál es el sistema político que se desee. "Y cuando se habla del sistema político -dijo- se puede hablar de las instituciones, porque éstas, ya sea el ejército, los ministerios, el gobierno, todo lo demás, debe ser de conformidad con la constitución. Por tanto prefiero no decir mi visión para Siria, prefiero decir cuál es la visión siria para el futuro de nuestro país. Esto necesita un diálogo, pero todavía es pronto ´para hablar de un dialogo, la prioridad del pueblo sirio ahora es luchar contra el terrorismo".
Argumentó que lo que está ocurriendo en Siria es una batalla contra la ideología wahabita. "Por eso, aseguró, tenemos que tratarla seriamente, pues nos ha afectado a nosotros y también a la sociedad europea".
Señaló que erradicar el extremismo es una prioridad, y la reconciliación política en las diferentes áreas, es otra prioridad. "Cuando se logre estos dos objetivos, entonces puedes hablar de lo que quieras con respecto a cualquier tema”, dijo.
Al referirse a los ataques terroristas de días recientes en Damasco, el mandatario dijo que mientras haya terroristas en Siria, cada ciudadano sirio está en peligro, sin duda. Pero, ¿quién apoya a esos terroristas?, preguntó.
Seguidamente, apuntó que esa pregunta me gustaría dirigirla a los funcionarios europeos "que se tomaron en el camino equivocado desde el comienzo de la crisis en Siria, lo que llevó a la destrucción de Siria y la propagación del terrorismo en la región, que a su vez condujo a ataques terroristas en muchos países europeos y creó la crisis de refugiados allí.
Enfatizó que el único papel occidental es apoyar a los terroristas y "lo siguen haciendo hasta el momento", añadió.
Subrayó que el papel de Irán es completamente diferente. "Ellos apoyan a Siria en la lucha contra los terroristas y políticamente, tanto en los foros regionales como internacionales. Israel, por otro lado, apoya directamente a los terroristas, ya sea logísticamente o a través de ataques aéreos directos contra nuestro ejército en zonas fronterizas", argumentó.
Al Assad destacó el apoyo de los rusos en la contienda antiterrorista en Siria, que junto al ejército sirio combaten a los terroristas, y han logrado de conjunto la liberación de Alepo y Palmira.
Para los que piden su abdicación para conseguir la paz, Al-Assad dijo que será el pueblo sirio quien decidirá su futuro, no las Naciones Unidas ni su Consejo de Seguridad. "Sólo escucho al pueblo sirio, no me importa lo que dice la ONU o cualquier otro funcionario extranjero. Creo que cuando se habla de refugiados y asesinatos, debemos tener en cuenta que parte de esos asesinatos fue a mano de los europeos, no directamente, sino a través de su apoyo a los terroristas que hasta el momento los llaman “moderados”, y saben que esto es una ilusión, no hay armados moderados en Siria, todos son extremistas".
Con respecto a los refugiados sirios dijo que no todos abandonaron su país a causa de los atentados terroristas o la destrucción, muchos de ellos -apuntó- partieron debido al embargo europeo u occidental, considerado complementario de la destrucción y el asesinato perpetrado por los terroristas, hecho que ha impulsado a las personas a abandonar su país a otros lugares, como Europa.
En otro momento de la entrevista, Al Assad enfatizó que el deber del gobierno sirio y de cada funcionario sirio es defender su país. "Si no hubiésemos defendido el país, entonces debemos sentirnos culpable, y arrepentidos, pero ¿cómo podría arrepentirse por defender su país?
En torno al diálogo intersirio señaló que desde el punto de vista del gobierno es importante dialogar con todos los sirios, incluidos los armados. "Esto es algo muy abierto porque ningún país o gobierno puede decir que va a hablar con terroristas, pero en nuestro caso, dijimos que vamos a dialogar con los terroristas para poner fin al derramamiento de sangre. Entonces, ¿cómo podemos arrepentirnos del diálogo y de ser abiertos?".
Indicó que esa misma pregunta debe hacerse a los funcionarios occidentales: "¿Se arrepienten de apoyar a los terroristas en Siria y se arrepienten de llamarlos moderados y decir que las manifestaciones eran pacíficas?"
"La guerra en sí misma es una lección muy dura para cualquier sociedad, por tanto cualquier país después de la guerra debería ser mucho mejor, porque aprende lecciones. Cuando la guerra proviene del exterior y usan agentes sirios junto a extranjeros, no basta con culpar a los demás, o culpar a Occidente o los estados petrodólares que apoyan a esos terroristas, al final tienes que mirarte a ti mismo y decir “¿qué pasa con mi país?” No estoy hablando de mí como presidente, estoy hablando como un ciudadano sirio", agregó.
Al Assad sostuvo que su prioridad es abrir y facilitar el diálogo entre los sirios, porque se trata de una discusión nacional sobre cuál es el sistema político que se desee. "Y cuando se habla del sistema político -dijo- se puede hablar de las instituciones, porque éstas, ya sea el ejército, los ministerios, el gobierno, todo lo demás, debe ser de conformidad con la constitución. Por tanto prefiero no decir mi visión para Siria, prefiero decir cuál es la visión siria para el futuro de nuestro país. Esto necesita un diálogo, pero todavía es pronto ´para hablar de un dialogo, la prioridad del pueblo sirio ahora es luchar contra el terrorismo".
Argumentó que lo que está ocurriendo en Siria es una batalla contra la ideología wahabita. "Por eso, aseguró, tenemos que tratarla seriamente, pues nos ha afectado a nosotros y también a la sociedad europea".