"¿Es esto una aceleración? De ningún modo. Es una reunión programada que se retrasó debido al período de duelo luego de la muerte de Fidel Castro, pero que estaba planeada hace mucho tiempo", afirmó el funcionario estadounidense, en referencia de su viaje a la Isla el próximo 8 de diciembre.

Esta será la quinta vez que la comisión bilateral se reúna, pero será la primera tras la victoria del republicano Donald Trump en las presidenciales de EE.UU., así como tras la muerte del citado líder revolucionario cubano.

Toner subrayó que el encuentro de La Habana tendrá como objetivo primordial hacer un balance de los avances logrados desde el inicio de las conversaciones el año pasado y definir los pasos a seguir para continuar con el acercamiento.

Explicó que se examinarán temas como la migración, los derechos humanos y la política económica, entre otros."El progreso no siempre ha sido constante en todos los temas, pero ciertamente nos esforzaremos por seguir avanzando", aseveró el portavoz.

Por su lado, la parte cubana volverá aponer sobre la mesa la eliminación del bloqueo y la devolución del territorio ilegalmente ocupado por Estados Unidos en Guantánamo, según indicó el martes la Cancillería cubana en un comunicado.