En declaraciones a la cadena británica BBC, con motivo del primer aniversario del inicio de la campaña aérea rusa en Siria, el ministro ruso de Exteriores recordó que EE.UU. rompió su compromiso de separar a los opositores sirios de grupos terroristas como Fatah al-Sham (Al Nusra) o Daesh.

"Ellos no pueden o no quieren hacerlo. Creemos que el plan era preservar a Al-Nusra, denunció Lavrov. Añadió que los estadounidenses no han atacado al citado grupo en ninguna parte de Siria.

Asimismo, defendió los bombardeos que realiza Rusia junto al Ejército sirio en la ciudad de Alepo y aseguró que Moscú está ayudando al Gobierno de Damasco a combatir a los terroristas.

El diplomático ruso acusó a Occidente de permanecer silencioso ante el sufrimiento de los civiles en Alepo.

Preguntado sobre las bajas civiles causadas por el presunto uso de municiones de fósforo y bombas de racimo por parte de las fuerzas rusas, Lavrov respondió que hasta la fecha no existe ninguna prueba significativa, por lo que es necesario investigar los supuestos casos reportados. Aseguró que Rusia no está utilizando ninguna munición que esté prohibida por las Naciones Unidas.

Por otro lado, las autoridades estadounidenses han expresado su condena al apoyo militar ruso al Gobierno sirio y minimizan la posibilidad de llegar a un acuerdo con Rusia para un alto al fuego en el país levantino. 

John Kerry, el jefe de la Diplomacia estadounidense, ha señalado que el avance de las fuerzas sirias apoyadas por Rusia en la batalla de Alepo requieren una respuesta más dura de su país y  ha dicho que el diálogo con Moscú está a punto de suspenderse.