Fayrouz y Assi Al-Rahbani... De la casualidad al legado eterno
Ambos artistas se conocieron en la radio libanesa y juntos iniciaron el camino hacia las estrellas...
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Fayrouz y Assi Al-Rahbani... De la casualidad al legado eterno
"¿Quién es la estrella aclamada en el Royal Festival Hall? ¿Madonna? ¿Springsteen? ¿Domingo? No… Fayrouz, la cantante más querida del mundo árabe”, así reseñó The Daily Mail un concierto de la artista libanesa celebrado durante la década de 1980 en Londres.
Algunos años antes, ella no soñaba con llenar conciertos ni con superar en ventas a otros cantantes. Su vida era tranquila en una radio local y eso le bastaba.
Pero entonces conoció al joven Assi Al-Rahbani y muy pronto los unió el deseo por renovar la música tradicional.
"Él me parecía orgulloso y pesado. Un día escuchó mi voz porque era un empleado de la banda y empezamos a trabajar juntos", relató la intérprete en una entrevista de televisión.
La chica libanesa tenía miedo de entrar en el mundo del arte, pero Assi le dio seguridad para seguir adelante y alcanzar el éxito.
"Su insistencia me ayudó a dar mis primeros pasos. Él decidía algo y lo continuaba incluso sin mi consentimiento", recordó.
Después de muchas miradas de soslayo, la relación profesional no tardó en convertirse en matrimonio.
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Fayrouz y Assi Al-Rahbani... De la casualidad al legado eterno
Tocar las estrellas
La carrera artística de Fayrouz abarcó desde la música árabe folclórica hasta himnos, baladas, poesía, operetas, villancicos y adaptaciones de temas clásicos occidentales.
Durante los años 60 del pasado siglo, los hermanos Rahbani compusieron cientos de sus más famosas canciones y produjeron tres filmes.
"Las películas que hicimos contenían todas las cosas que amamos, incluidos los lugares, las historias, las personas y las montañas", comentó la vedette.
También protagonizó más de 20 obras de teatro lírico en Beirut y actuó en la Feria Internacional de Damasco.
En 1961 inició sus giras mundiales, recorrió Brasil, Argentina, EE.UU., Gran Bretaña, Francia, entre muchos otros países.
Tras el conflicto civil del Líbano (1975-1990), ella permaneció en su país y expresó su solidaridad con las víctimas.
En ese entonces rechazó cantar de forma privada para el shah de Irán Mohammad Reza Pahlevi y tampoco aceptó la petición del presidente libanés Elías Sarkis de realizar una velada para los reyes y jefes de Estado reunidos en El Cairo.
Tres años después, se separó artísticamente de los hermanos Rahbani y comenzó a trabajar con su hijo, el también compositor Ziad Rahbani.
El 21 de junio de 1986, Assi Rahbani murió después de pasar varias semanas en coma. La nación libanesa enlutó. Los familiares y admiradores acompañaron sus restos hasta el este de Beirut.
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¿Cómo seguir en el mundo del arte?
Durante los años ochenta del siglo XX, Fayrouz produjo nuevos discos, apoyada en los poemas de Joseph Harb, la música de carácter más oriental y atemporal de Philemon Wehbe, y la innovación de Ziad Rahbani.
En 1985 ofreció un gran concierto en Siria, en el anfiteatro romano de Bosra y reunió a más de 150 mil personas.
A lo largo de la década de 1990 produjo tres discos y realizó varios macroconciertos, entre ellos el histórico celebrado en Beirut en septiembre de 1994, con motivo del renacimiento del distrito centro de la ciudad.
Los éxitos continuaron en numerosos espectáculos internacionales, entre ellos el celebrado en Las Vegas, EE UU, en 1999, con más de 16 mil espectadores.
En 2002 publicó el álbum Wala Kif, y a lo largo de estos últimos años ofreció conciertos en varias ciudades del mundo. Su última actuación fue en Damasco, Siria.
