La 46° edición de la Feria Internacional del Libro de Argentina, una de las celebraciones más importantes de la literatura latinoamericana, se inauguró en Buenos Aires, luego de que las dos ediciones anteriores resultaran suspendidas por la pandemia de la COVID-19. 

En esta ocasión, La Habana es la ciudad invitada de honor. Por tanto, la historia, el cine, la música y la artesanía caribeña engalanarán la actividad que, durante casi tres semanas, espera ser visitada por más de un millón de lectores y 12 mil profesionales.

El programa incluye conferencias, presentaciones de libros, cursos, charlas, festivales de poesía, diálogos entre narradores y una jornada de microficción.

Durante la inauguración, el Ministro de Cultura, Tristán Bauer, señaló: “Nos alegra profundamente que la capital cubana sea la invitada en esta edición. Grandes mujeres y hombres nacieron allí, entre ellos, Jose Martí (1853-1895), figura que une a nuestros pueblos a través de la prédica por el mejoramiento humano”.

Asimismo, el titular resaltó la importancia del espacio que une a los profesionales y al público: “Los libros no pueden ser objeto de lujo. Aspiramos a que cada niño se encuentre con ellos”, expresó el funcionario.