Ballet Nacional de Cuba destaca trabajo junto a coreógrafo británico
El actual director artístico del Texas Ballet Teather estrenará en Cuba una obra creada para celebrar el Jubileo de Platino por el aniversario 70 de la monarquía de Isabel II de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
La directora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), Viengsay Valdés, manifestó orgullo por trabajar junto al coreógrafo británico Ben Stevenson y disfrutar de su manera especial de enseñar.
Según afirmó Valdés, su visita a la isla permite explorar nuevos repertorios que enriquecen la experiencia del colectivo danzario y da cumplimiento al objetivo de diversificar el conjunto y regalar al público obras de reconocimiento mundial.
Valdés se refirió a la capacidad de resistencia de Stevenson y estableció una similitud con Fernando y Alicia Alonso en la forma de corregir, destacando siempre la interpretación, buscando los matices y la honestidad del intérprete en su baile.
El actual director artístico del Texas Ballet Teather estrenará en Cuba Los corceles de la reina, creada para celebrar el Jubileo de Platino por el aniversario 70 de la monarquía de Isabel II de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
Además de la pieza que tiene música de Amilcare Ponchielli, para la ocasión se exhibirá la versión del Esmeralda pas de deux, Tres Peludios y Mozart Requiem, esta última resulta la única creación de Stevenson que tiene montaje fuera de su compañía.
Viengsay agradeció al Oficial de la Orden del Imperio Británico por donar cuatro de sus obras al conjunto y valoró el acto de bello y altruista al tratarse de coreografías de un elevado e impresionante proceso creativo.
Las presentaciones, que festejan además los 120 años de las relaciones diplomáticas entre Reino Unido y Cuba, tendrán música en vivo por intermedio del Coro del Teatro Lírico Nacional y la Orquesta Sinfónica del Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso.
En declaraciones a la prensa, Stevenson calificó a los cubanos de fabulosos y buenas personas; en tanto reconoció la calidad profesional de los intérpretes, su desborde de entrenamiento e inspiración.