El ministro sirio de Salud, Nizar Yazigi, denunció que las medidas económicas coercitivas unilaterales y la Ley César han tenido un impacto negativo sobre el sector, en particular la importación de medicamentos.

En conferencia de prensa, el titular subrayó que el aumento en el número de infectados por la COVID-19 a nivel nacional y sobrepasar los enfermos la cifra de 500, además del aumento horizontal y vertical de esa enfermedad, alerta de una mayor diseminación en caso de no cumplir con las medidas preventivas por parte de los individuos y la comunidad.

Yazigi indicó que Siria logró durante los primeros meses controlar la pandemia a nivel nacional mediante la aplicación de medidas preventivas en todos los sectores de tal manera que no se registraron casos ningunos. 

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“Sin embargo, el levantamiento gradual de dichas medidas y la repatriación de ciudadanos contribuyeron a un aumento considerable en el número de infectados en las últimas dos semanas”, enfatizó.

Según el titular, “no se puede continuar con el paro del movimiento económico y de servicio debido a las repercusiones catastróficas que tiene sobre la comunidad” y destacó que el cumplimiento de las medidas preventivas por parte de los individuos es la base para evitar la propagación de la pandemia.

“Los equipos de pesquisa están trabajando en todas las provincias para detectar cualquier caso sospechoso, además de dar seguimiento a las personas que han estado en contacto con personas infectadas”, remarcó.

En cuanto al aumento en el número de fallecimientos por causas desconocidas, Yazigi atribuyó esa cuestión a la no declaración por parte de las personas enfermas o la demora en hacer consulta médica.

“Continúa la repatriación gradual de ciudadanos varados del exterior y se está estudiando una fecha para la reapertura de los aeropuertos”, reveló.