El mundo enfrentará el hambre en 2023
En la Cumbre de Seguridad Alimentaria Mundial de la ONU se advirtió sobre una crisis devastadora el próximo año si el conflicto ruso-ucraniano continúa.
La agricultura estadounidense enfrenta una mala cosecha este año, lo que agrava la crisis mundial de suministro de alimentos, según los ejecutivos de la industria, reflejado por Bryan Jung de The Epoch Times.
El informe precisa que el suministro de alimentos en todo el mundo es escaso, desde que se cortaron los envíos vitales de recursos necesarios para fabricar fertilizantes y productos de grano tras el inicio del conflicto ucraniano.
Varios ejecutivos de alto nivel de grandes empresas agrícolas como Bayer, Corteva, Archer Daniels Midland y Bunge, sostienen que se necesitarán al menos dos años más de buenas cosechas en América del Norte y del Sur para aliviar las presiones de suministro.
"La expectativa actual es que los mercados mundiales de cereales y oleaginosas necesitan dos años consecutivos de cosechas normales para estabilizar la oferta mundial", dijo Chuck Magro, director ejecutivo de Corteva, en una presentación a los inversores esta semana.
Estados Unidos y Sudamérica, dos de los principales exportadores de cultivos del mundo, se enfrentaron este verano a una persistente sequía.
El Departamento de Agricultura anunció el 12 de septiembre que rebajó sus estimaciones de producción de maíz a nivel nacional a 13 mil 900 millones de búshels, lo que significa un tres por ciento menos que sus previsiones de agosto, y de un ocho por ciento menos que la cantidad total cosechada el año pasado.
Asimismo, señala el informe que las proyecciones de producción de soja en septiembre se redujeron en un tres por ciento respecto a agosto, un poco menos que en 2021.
El temor a la recesión mundial también pesó en los mercados de productos alimentarios, y el prolongado conflicto en Ucrania no ha ayudado, acentuó el informe.
Los futuros del precio del trigo en la Bolsa de Chicago subieron un 17 por ciento en los últimos 12 meses, según el diario estadounidenses de Wall Street Journal. Asimismo el maíz subió cerca de un 28 por ciento, mientras que la soja se elevó un 14 por ciento.
Precisa el reporte que los precios de los cultivos empezaron a bajar después de que un acuerdo de julio entre Rusia y Ucrania -gestionado por Turquía a través de las Naciones Unidas- permitiera exportar más de un millón de toneladas de grano almacenado en Ucrania a través del Mar Negro.
Según dijo Juan Luciano, director general de Archer Daniels Midland, en una conferencia de inversores celebrada en septiembre, el acuerdo ha permitido al país aumentar los envíos a cerca del 60 por ciento de la capacidad anterior y que podría aumentar hasta el 80 o el 90 por ciento si se mantiene.
Por otra parte, en la Cumbre de Seguridad Alimentaria Mundial de la ONU, celebrada el 20 de septiembre, se advirtió de una crisis devastadora el próximo año si la guerra continúa. Representantes de Estados Unidos se unieron a funcionarios de la Unión Europea y la Unión Africana para debatir el efecto del conflicto en Ucrania sobre los precios de los alimentos.
Se dijo además que 345 millones de personas se enfrentan a la inanición, con 70 millones directamente afectados por los envíos de alimentos interrumpidos por la guerra en Ucrania.
Este verano, UNICEF y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, dijeron que entre 702 y 828 millones de personas se vieron afectadas por el hambre el año pasado (2021), debido a las interrupciones causadas por la pandemia.