La visita del presidente iraní Ebrahim Raisi el 23 de mayo se produjo en medio de conversaciones internacionales estancadas para reactivar un acuerdo sobre el programa nuclear de Teherán, dejando a la república islámica bajo sanciones.

En ese momento, la agencia oficial de noticias de Omán informó que los países habían firmado memorandos de entendimiento sobre petróleo y gas, pero no proporcionó detalles.

El sábado, la agencia citó al ministro de Energía, Mohammed al-Rumhi, diciendo que los acuerdos estaban "relacionados con el desarrollo de los dos proyectos de gasoductos que unen a los dos países y el campo petrolero de Hengam".

Se llegó a un acuerdo hace unas dos décadas para permitir que Irán suministre gas a Omán, pero el proyecto nunca se materializó. Las sanciones a Irán complicaron los esfuerzos para ejecutar ese proyecto y también podrían dificultar la implementación del nuevo acuerdo.

El yacimiento petrolífero de Hengam se encuentra en el estratégico Estrecho de Ormuz, cerca de los Emiratos Árabes Unidos. Omán tiene estrechos vínculos políticos y económicos con Irán y desempeñó un papel de mediador entre Teherán y Washington en la preparación del acuerdo nuclear original en 2015.

Las conversaciones intermitentes comenzaron en abril del año pasado para restaurar el acuerdo, después de que Estados Unidos se retirara unilateralmente de él en 2018 y volviera a imponer sanciones mordaces a Irán, lo que llevó a Teherán a revertir sus compromisos.

El acuerdo de 2015 le dio a Irán un alivio de las sanciones económicas paralizantes a cambio de restricciones en sus actividades nucleares.