Desclasifican nuevos documentos sobre la CIA y Lee Harvey Oswald
Un memorándum no editado añade profundidad a nuestra comprensión de la respuesta de la CIA a las acusaciones de que Oswald trabajó con la agencia de espionaje.
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Desclasifican nuevos documentos sobre la CIA y Lee Harvey Oswald
La administración Biden desclasificó una nueva pista la semana pasada sobre la relación entre Lee Harvey Oswald y la Agencia Central de Inteligencia. Entre las intersecciones entre Oswald y la CIA, su tiempo como joven infante de marina en las instalaciones aéreas navales de Atsugi en Japón en 1957 es uno de los más destacados.
Atsugi fue una plataforma de lanzamiento para vuelos de espionaje U-2 sobre la Unión Soviética y también fue un centro de investigación de la CIA sobre drogas psicodélicas. “Un memorando de la CIA titulado 'Drogas de la verdad en el interrogatorio' reveló la práctica de la agencia de dosificar agentes marcados para misiones peligrosas en el extranjero”, escribió el autor David Talbot en “The Devil's Chessboard”, su biografía de 2015 del exdirector de la CIA Allen Dulles .
La exploración de Talbot del vínculo terminaba ahí: “Algunos cronistas de la vida de Oswald han sugerido que él era uno de los jóvenes infantes de marina en los que la CIA realizó sus pruebas de ácido”.
Un nuevo documento publicado en su totalidad la semana pasada se relaciona directamente con el tiempo de Oswald en Atsugi , revelando detalles sobre la respuesta de la CIA al testimonio de un ex contador de la agencia de que el servicio de espionaje había empleado a Oswald, quien se convirtió en un pistolero en el asesinato del presidente John. F. Kennedy en 1963.
El papel de la CIA en el asesinato de Kennedy sigue siendo uno de los grandes misterios sin resolver de la historia estadounidense. La mayoría de los estadounidenses cree que el presidente fue asesinado como parte de una conspiración que fue más allá de Oswald, y aproximadamente un tercio cree que la CIA o elementos dentro de la CIA intervinieron.
La teoría principal plantea el asesinato como una respuesta al despido de Dulles por parte de Kennedy, un poderoso corredor de capa y espada, luego de la fallida operación Bahía de Cochinos de la CIA para derrocar al gobierno comunista de Fidel Castro en Cuba. Algunos creyentes de la teoría también apuntan a la evidencia de que Kennedy estaba amargado por la Guerra de Vietnam o el militarismo en general. Si Dulles orquestó un golpe contra Kennedy, estaría lejos de ser el primero.
Un memorando de 1978 informa que un empleado de finanzas de la CIA, James Wilcott Jr., había informado a un panel de la Cámara que exploraba el asesinato que “la CIA contrató a Lee Harvey Oswald cuando Oswald sirvió en Atsugi”. El memorando continúa poniendo en duda la afirmación de Wilcott, señalando que llegó a Tokio en 1960, después de que Oswald abandonara la base, lo que sugiere que la afirmación de Wilcott se basa en información de "segunda mano".
La administración Trump desclasificó una versión del documento en 2017, aunque redactó una parte de una nota que se encuentra en la parte inferior. Esa redacción oscureció el nombre de un funcionario de la CIA, Dan Nieschur, que respondió a las solicitudes de los investigadores del Congreso en la década de 1970 y buscó en los archivos de Oswald. Jefferson Morley, editor del boletín JFK Facts de Substack , dijo que el levantamiento intrascendente de tales redacciones parece ser común en la publicación de este último documento, lo que permite al gobierno afirmar que está publicando miles de documentos, mientras que la mayoría ya eran de dominio público.
El memorando, escrito a una persona identificada solo como “JHW”, explica que el oficial de la CIA Russ Holmes “heredó los llamados archivos de Oswald, pero me aseguró que la Agencia no tuvo contacto con Oswald”. El memorando dice que los "registros contrarios" podrían estar en "EA", una probable referencia a la oficina de Asia Oriental de la CIA, y que serían buscados y verificados si se encuentran". “Lo persigue”, dice el memorándum de Holmes , quien se volvió legendario por su archivo de la CIA ahora desclasificado sobre el asesinato.
Los nuevos archivos de JFK incluyen una serie de registros de personal relacionados con Wilcott, cuyo testimonio ante el comité de la Cámara a fines de la década de 1970 fue noticia en ese momento .
Los próximos años de Oswald tienen mucho más sentido con una conexión con la CIA que sin ellos. Después de estudiar ruso mientras estaba en el ejército, tal vez entrenado en la Escuela de Idiomas del Ejército en Monterey, California, según Talbot, y remitió el reclamo al abogado principal de la Comisión Warren , J. Lee Rankin, Oswald fue dado de baja con un reclamo falso de la mala salud de su madre. .
Completamente arruinado, con solo $203 en su cuenta bancaria, tomó un barco a Inglaterra nueve días después de su alta. Luego, según su esposa, Oswald tomó un vuelo de transporte militar a Finlandia y se hospedó en dos de los mejores hoteles de Helsinki.
Oswald luego tomó un tren nocturno de Helsinki a Moscú. Una vez allí, se presentó en la embajada de Estados Unidos para anunciar que se convertía en desertor. El personal de la embajada recordó más tarde que su discurso de deserción sonaba extraño y ensayado. Pasó dos años y medio en la Unión Soviética y luego, tan curiosamente como había desertado, regresó a Estados Unidos.
Si la serie de movimientos, desde el despido hasta la huida, la deserción y el regreso, se realizaron a instancias de la CIA, tienen sentido, con Oswald desempeñando algún tipo de papel en el inescrutable mundo del espionaje. En ausencia de un enlace de inteligencia, el tic-tac de los años posteriores al servicio militar de Oswald estaría situado en algún lugar entre extraordinariamente inverosímil e imposible de lograr.
Se sabe que la CIA exploró los usos creativos de los psicodélicos, y Dulles estaba específicamente al tanto de estas actividades, incluso proponiendo algunos de los usos. El 2 de marzo de 1960, según un informe desclasificado de la CIA incluido en el documento publicado la semana pasada, el director de la CIA informó a Richard Nixon, entonces vicepresidente, sobre una propuesta para tratar con Fidel Castro y Cuba. El informe, que parece ser otra versión de un documento previamente desclasificado, incluía planes para el sabotaje económico de la producción de caña e interferencia con las entregas de petróleo.
Una idea más innovadora presentada en el informe, según la CIA, parece ser una referencia a dosificar a Castro con LSD, con lo que la agencia estaba experimentando en ese momento. A Nixon se le dijo que la agencia tenía “una droga que, si se colocaba en la comida de Castro, lo haría comportarse de una manera tan irracional que una aparición pública podría tener resultados muy perjudiciales para él”.
La afirmación de la CIA de no haber tenido contacto con Oswald se ve socavada por el hecho de que George de Mohrenschildt, un activo de la CIA, se hizo amigo cercano de Oswald en los meses previos al asesinato. Esa primavera, de Mohrenschildt viajó a Nueva York, Filadelfia y Washington. Según los documentos encontrados en los archivos recién desclasificados, al mismo tiempo que su viaje, la División de Operaciones Nacionales de la CIA realizó una búsqueda sobre De Mohrenschildt, "se desconoce el motivo exacto", según dos documentos creados por un analista de la CIA incluidos en la desclasificación de la semana pasada. .
El brazo encubierto de la división estaba dirigido en ese momento por E. Howard Hunt, un especialista en operaciones clandestinas que confesó más adelante en su vida que se enteró de antemano de una conspiración para asesinar a Kennedy que involucraba a figuras de alto nivel en la CIA.
“Es interesante que el interés de Allen en De Mohrenschildt coincidiera con la parte anterior de este viaje”, concluye el memorando, refiriéndose a Gale Allen, un oficial de casos de la División de Operaciones Nacionales de la CIA en ese momento, “y la información sugeriría que posiblemente Allen y de Mohrenschildt posiblemente estaban en el mismo entorno en Washington, DC, alrededor del 26 de abril de 1963”.
A raíz de la publicación del último documento, que también retuvo innumerables documentos adicionales, el presentador de Fox News, Tucker Carlson, informó que una fuente que revisó los registros no revelados dijo que incluían evidencia de la participación de la CIA en el asesinato. Carlson dijo que había invitado a su programa a su amigo Mike Pompeo, el ex director de la CIA que también ocultó documentos cruciales, para responder. “Aunque rara vez rechaza una entrevista televisada, se negó a venir”, dijo Carlson. “Esperamos que lo reconsidere”.
