Prosiguen las manifestaciones en Irak
Algunos infiltrados han comenzado a dirigir las protestas en otras direcciones, incluido el bloqueo de carreteras y los ataques a misiones diplomáticas.
En la continuación de las protestas en Irak, las autoridades cerraron los puentes de Al-Ahrar, Al-Senk y Al-Jumhuriya con bloques de cemento, luego que los manifestantes intentaron su cruce, informó el corresponsal de Al Mayadeen en Bagdad.
Señaló también que en el puente al-Allawi y en el sur, los indignados erigieron tiendas de campaña en la puerta del proyecto del aeropuerto internacional de Karbala, cerraron la carretera de Najaf-Karbala y quemaron neumáticos frente al edificio del gobierno local.
El lunes, los servicios de seguridad iraquí frustraron un complot terrorista que pretendía llevar a cabo ataques al mismo tiempo que se desarrollaban con manifestaciones en el país.
La entidad militar iraquí, por medio de su cuenta de Twitter, comunicó que una fuerza de comando de operaciones especiales arrestó al terrorista identificado como "Abu Haroun" en una emboscada al sur de la capital.
Agregó que después de su interrogatorio se encontraron armas, tiendas de campaña, equipos explosivos y de comunicaciones destinados para las operaciones terroristas.
El cheikh Qais al-Khazali, secretario general del Movimiento Asa'ib Ahl al-Haq de Irak, reveló que el Mossad israelí tiene una estación en la provincia de Sulaymaniyah, en la región de Kurdistán, y acusó a una de las tres presidencias de estar detrás de los acontecimientos actuales en el país.
Las manifestaciones también continúan en la capital, Bagdad, y en varias zonas del centro y sur de Irak.
Las fuerzas de seguridad no atacaron a los manifestantes
El presidente del Grupo de los Ulemas Musulmanes de Irak, cheikh Khalid al-Mulla, dijo en entrevista con Al Mayadeen que todos los iraquíes reconocen el derecho a las protestas y subrayó que "las fuerzas de seguridad no atacaron a los manifestantes".
"Algunos infiltrados han comenzado a dirigir manifestaciones en otras direcciones, incluido el bloqueo de carreteras y los ataques a misiones diplomáticas. Irak pasará por una nueva fase de violencia con nuevas herramientas y no queremos que el desarrollo de estos acontecimientos” dijo Al-Mulla, quien culpó las instituciones estatales y a la clase política por lo que sucede en el país.
Al-Mulla agregó que "una gran parte de los manifestantes aceptan las medidas de reforma, pero quienes las rechazan quieren destruir el país”.
El lunes, los servicios de seguridad iraquíes frustraron un complot terrorista destinado a realizar ataques en medio de las manifestaciones.