El anuncio de la formación del nuevo Gobierno libanés  es un paso esencial para garantizar que el país pueda hacer frente a las múltiples crisis que lo afectan, expresó un comunicado de la Unión Europea (UE).

Según la declaración del bloque comunitario, el nuevo ejecutivo "debe abordar rápidamente los graves problemas económicos y promulgar reformas estructurales para responder a las necesidades y expectativas del pueblo libanés".

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Además, sugiere la UE que en la nación árabe "debe garantizarse la protección adecuada a los grupos más vulnerables de la sociedad".

De acuerdo con el texto, la Unión Europea está apoyando a El Líbano en las reformas sociales y económicas, "así como ayudando a reforzar la buena gobernanza, la rendición de cuentas y la lucha contra la corrupción".

Mientras Estados Unidos sugirió que "la prueba del nuevo gobierno de El Líbano serán sus acciones y su capacidad de respuesta a las demandas del pueblo de implementar reformas y luchar contra la corrupción".  

Sólo un gobierno que sea capaz y esté comprometido a emprender reformas reales y tangibles restaurará la confianza de los inversores y desbloqueará la asistencia internacional para El Líbano, a juicio de la Casa Blanca.