Rosemary Di Carlo, subsecretaria general de las Naciones Unidas para Asuntos Políticos, ratificó el compromiso del organismo multilateral respecto al acuerdo nuclear con Irán, y expresó su pesar por la retirada de Estados Unidos y la reimposición de sanciones contra ese país.

“Estas medidas se consideraron incompatibles con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, dijo.

Y pidió a todas las partes en el conflicto de Medio Oriente que se retiren de cualquier acción que aumente la tensión en esta región, que ha sido escenario de peligrosos ataques.

“Lamentamos las medidas que ha tomado Estados Unidos desde mayo de 2018, cuando se retiró del amplio Plan de acción conjunto. También lamentamos las medidas que ha adoptado Irán desde julio pasado para reducir algunas de sus obligaciones en virtud del acuerdo. La imposición de las sanciones por Estados Unidos que fueron levantadas bajo el plan de acción son inconsistentes con los objetivos del plan y de la Resolución 2231”, agregó.

Asimismo, señaló que las medidas tomadas por Estados Unidos para no extender la excepción del comercio de petróleo con Irán, así como los proyectos no relacionados con la proliferación nuclear, limitan la capacidad de Irán y otros estados miembros para implementar los términos del plan y la resolución.

Por otro lado, Di Carlo describió el asesinato del científico iraní Mohsen Fakhrizadeh como un acto terrorista. Agregó que su nombre está incluido en las listas de la Resolución 2231, que anula sanciones anteriores contra Irán.