Al Mayadeen revela informaciones sobre asesinato de Suleimani y Al Muhandis
Dirigente en el movimiento iraní al-Nujaba, Hashem Al Mousawi, reveló que el asesinato de los mártires, Qassem Suleimani y Abu Mahdi Al Muhandis, fue planeado meses anteriores en coordinación entre el expresidente de Estados Unidos Donald Trump y su embajador en Iraq.
En una entrevista con Al Mayadeen, Al Mousawi señaló que el Embajador de Estados Unidos en Iraq exigió el asesinato de Suleimani porque lo consideraba una amenaza para la seguridad de Estados Unidos en la región.
Al Mousawi expresó que el asesinato de Suleimani "tiene una dimensión estratégica global, y su venganza será al nivel mundial" y señaló que "el comandante de la Fuerza Quds llevaba una respuesta a un mensaje enviado por Arabia Saudita a Irán para salir y resolver las guerras en la región".
Al Mousawi dijo que "Estados Unidos presionó a Arabia Saudita para evitar que se acercara a Irán y negociar sobre los expedientes de la región, con el fin de preservar su presencia", y subrauó que "Estados Unidos quería resolver los expedientes de Iraq, Yemen, Líbano y Siria mediante el asesinato de Suleimani".
Reveló también que tenían información de que los aviones de guerra estadounidense y los drones estaban operando desde varias bases árabes, y agregó que "habíamos recibido amenazas de los estadounidenses sobre atacar el cuartel general y las figuras principales, y estábamos en un estado de preparación".
Mousawi aclaró "no sabíamos sobre el contacto que tuvo lugar entre Trump y el ex primer ministro iraquí Adel Abdul Mahdi antes del asesinato. Si hubiéramos sabido del contacto antes, habríamos realizado una encuesta de información completa porque no confiamos en Estados Unidos”.
Indicó también que la insistencia de Abdul Mahdi para que Suleimani asista es parte de una operación planificada y organizada para asesinarlo", y que "los estadounidenses eligieron el momento y el lugar para implementar su plan; el martirio del comandante Abu Mahdi Al Muhandis junto a Suleimani no fue una coincidencia".
Al Mousawi explicó que “los perpetradores de la operación insistían en matar a todos los miembros del convoy, lo que indica la decisión de la administración estadounidense de matar a los dos mártires juntos'', y enfatizó que la Resistencia iraquí posee misiles avanzados e inteligentes, pero ataca a cuarteles militares, y no misiones diplomáticas.
"Arabia Saudita incitó a Estados Unidos y apoyó a ´Israel´ para que llevara a cabo una operación financiada por ellos para matar a Al Muhandis", dijo, al acusar Arabia Saudita de "pagar dinero a Trump e ´Israel´ para atacar a Iraq con el pretexto de venganza a los ataques contra las instalaciones de Aramco".
Por su parte, el director de la revista Irán Diplomatic, Imad Abeshnas, expresó al canal que "el programa de Mártir Suleimani no incluía una visita a Iraq, sino a Líbano y Siria, y estaba realizando reuniones para resolver la crisis de Yemen".
Señaló que "Suleimani llevaba una fórmula de entendimiento para resolver la crisis yemení para que los iraquíes a su vez la pasen a los saudíes".
Abeshnas enfatizó que "los estadounidenses pidieron al gobierno iraquí que convocara a Suleimani para negociar con un delegado ante ellos a través del gobierno iraquí", y agregó que "Suleimani no habría viajado a Bagdad en esta fecha sin la insistencia de los estadounidenses".
Sobre el papel de la empresa de seguridad británica en el asesinato
En un contexto relacionado, el líder del movimiento "al-Nujaba" reveló que la empresa de seguridad británica representaba una sala de operaciones que monitoreaba los movimientos de los líderes de la resistencia y los invitados iraníes".
Al Mousawi dijo: "Recibimos información sobre una empresa británico-estadounidense-israelí", la cual señalaba que era la empresa espía, que presentaba informes diarios a la embajada de Estados Unidos y a las bases estadounidenses en Iraq y Qatar.
Por su parte, director de la revista Irán Diplomatic dijo que el papel de la empresa británica en el asesinato se llevó a cabo por decisión y en coordinación con la inteligencia estadounidense, británica e israelí.
Abeshnas aclaró que "ni los aliados ni los amigos de Irán en Iraq sabían de la visita de Suleimani, mientras la compañía de seguridad informó a Estados Unidos del momento de su entrada a Iraq. "La inteligencia estadounidense no estaba segura de que Suleimani vendría a Bagdad, y la compañía británica les había confirmado su llegada", agregó.