Unidad europea es cosa del pasado
El centro de gravedad político se está desplazando a Asia. La unidad europea parece que se despedaza.
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Unidad europea es cosa del pasado
Durante siglos, hasta el XX incluido, Europa parecía el eje central de la historia mundial, pero llegaron las guerras, desde 1914 hasta 1945, en la que todas las grandes potencias -Gran Bretaña, Francia, Alemania, Italia, Rusia-, junto con casi todas las demás, libraron algunas de las mayores batallas de la historia.
Como resultado: Europa se dividió entre un Occidente liderado por Estados Unidos y un bloque soviético comandado por Moscú.
Sin embargo, incluso durante esa Guerra Fría, Europa era vista como el premio de la lucha. Cuando la Guerra Fría terminó, se estaba gestando una Unión Europea basada en el modelo de la Unión Americana, y casi todas las naciones recién liberadas de Europa comenzaron a unirse a la alianza de la OTAN.
Todo parece indicar que el pivote estadounidense hacia China y el Indo-Pacífico es histórico y permanente, y que así como el pasado pertenece a Europa, el futuro pertenece a Asia.
Al fin y al cabo, Asia alberga a las naciones más pobladas del mundo, China e India; a seis de las nueve potencias nucleares; y a casi todas sus principales naciones musulmanas: Indonesia, India, Pakistán, Bangladesh, Turquía e Irán, así como las mayores economías del mundo fuera de Estados Unidos: China y Japón.
Como se conoce, los británicos se unieron a los australianos y a los estadounidenses en un pacto AUKUS que echó por tierra un preciado acuerdo francés para construir una docena de submarinos con motor diésel y sustituirlos por submarinos de potencia nuclear construidos por británicos y estadounidenses.
París lo consideró una "traición", una "puñalada por la espalda" Sin embargo, AUKUS fue también una declaración innegablemente clara de dónde veían los australianos su futuro, y no era junto a Francia, sino a los Estados Unidos.
Para protestar por el trato dado a Francia en el acuerdo de los submarinos, el presidente Emmanuel Macron retiró a su embajador en Estados Unidos, algo que nunca se había hecho desde que el país galo reconoció a las colonias americanas y acudió en su ayuda durante nuestra Guerra de Independencia.
Los británicos están fuera de la U.E., y los franceses están alejados de sus aliados de la OTAN, Alemania celebró unas elecciones en las que, por primera vez en su historia, la Unión Demócrata Cristiana de Konrad Adenauer, Helmut Kohl y Angela Merkel quedó reducida a un cuarto de los votos nacionales.
El nuevo líder de Alemania, tras meses de negociaciones, puede ser el de los socialdemócratas, en concierto con los verdes. Pero incluso ese gobierno podría no estar formado para Navidad. Ninguno de los posibles cancilleres de la Unión Demócrata Cristiana o del Partido Socialdemócrata tiene la talla de Merkel, que ha sido tanto líder de Alemania durante la última década y media como de Europa.
En 2001, invocando el Artículo V sobre que un ataque a uno es un ataque a todos, la OTAN se unió a los estadounidenses en su incursión en Afganistán para hacer frente a los autores del 11-S. Este agosto, 20 años después, todos los aliados de la se retiraron cuando el ejército afgano se desmoronó y desapareció y el régimen se derrumbó. Los aliados de la OTAN compartieron así la ignominia de la retirada y la derrota estadounidenses.
No sólo el centro de gravedad política se está desplazando de Europa a Asia, sino que la unidad europea parece ser algo del pasado.
Mientras, Gran Bretaña ha abandonado la U.E., Escocia está considerando la secesión de Inglaterra. Cataluña sigue pensando en salirse de España. Cerdeña se plantea abandonar a Italia. Polonia y Hungría están en desacuerdo con la U.E. por las reformas políticas internas que, según se dice, entran en conflicto con las exigencias de los burócratas de Bruselas.