Gabriel Boric apuesta por llegar a la presidencia de Chile
Fue uno de los que lideró la protesta en 2011 por una reforma de la educación en su país, la cual tuvo repercusión a nivel mundial.
El candidato más joven que se apresta a discutir la presidencia de Chile Gabriel Boric, con 35 años, es un veterano en las lides políticas y un viejo conocido para los habitantes de su país.
En 2011, junto a Camila Vallejo, Karol Cariola y su actual vocero de campaña, Giorgio Jackson, que encabezó las manifestaciones que sacudieron la nación demandando una educación gratuita, libre y de calidad.
Más tarde, Boric se convirtió en vocero de la Confederación de Estudiantes de Chile, la Confech, cuyo papel en los movimientos sociales para la época fue fundamental. Para 2014, conseguía un escaño como diputados, representado a la región más austral del Chile, su natal Magallanes, tan lejana a Santiago como olvidada por sus políticas centralistas.
Fue elegido como candidato independiente cuando aún estaba vigente el sistema binominal heredado de la dictadura de Augusto Pinochet. Su reelección se produjo en 2017, convirtiéndose en el más votado de su región y en el segundo de todo el país.
La generación del candidato permitió un cambio dentro de la élite, primero accediendo al Congreso, como diputados, y posteriormente para instalar nuevos temas en la agenda política chilena, que tienen que ver con los desafíos que enfrenta el país: medioambientales, de transición energética, de identidad, disidencia sexual, feminismo…”, señalan analistas.
Su protagonismo político se refuerza con el estallido social del 18 de octubre de 2019, donde Boric tendría un papel importante a la hora de buscar una salida institucional a una entonces profunda crisis democrática, cuando el 15 de noviembre de ese año todos los partidos políticos de manera histórica alcanzan un acuerdo contrarreloj que frenaría la violencia desatada de las calles y marcaría el comienzo a la actual escritura de una nueva Constitución.
“Boric es una figura clave en la firma del Acuerdo de Paz del 15 de noviembre del año 2019 y eso provoca una serie de críticas” especialmente dentro de la coalición de izquierdas a la que pertenece, el Frente Amplio, provocando de la renuncia de dirigentes y miembros de base de su propio partido, Convergencia Social, explica a France 24 Octavio Avendaño, académico del departamento de Sociología de la Universidad de Chile.
Eso se fue revirtiendo porque el Acuerdo ganó un cierto apoyo y las críticas se atenuaron con el paso del tiempo hasta validar el papel que tiene hoy. “Representa todo ese anhelo de cambio, sobre todo en el sector juvenil, en el sector excluido, de clase media, universitario”, señala Avendaño.
A partir de ahí la gran sorpresa se produce con la categórica victoria de Boric en las primarias de julio de la coalición Apruebo Dignidad, en las se impuso con más del 60 % de los votos. De ahí pasa a liderar durante muchas semanas las encuestas de preferencia de votos en las presidenciales.
Se trata de una generación comprometida con “terminar con aquellas instituciones que representan la herencia de la dictadura del general Augusto Pinochet y eso ha motorizado el proceso que Chile vive en la actualidad", añade el académico y escritor político a France 24
Mientras, analistas consultados por la publicación francesa dicen que su falta de experiencia puede ser un punto flojo frente a sus adversarios. Si bien su mal manejo de las cifras ha marcado los chascarrillos del mundo político en los últimos días, su debilidad tendría que ver más con un equipo técnico que no es capaz de sortear con soltura como otros de sus errores programáticos.
Incertidumbre a un mes de las elecciones
Muchos apuestan a que Boric será uno de los candidatos que pasen a una segunda vuelta en diciembre que se da casi por hecha. Pero todo es posible en esa insólita nueva contienda presidencial que vive Chile, sin certezas.
Si lograra imponerse definitivamente, algo que es bien incierto. Sería la primera vez en dos siglos que alguien tan joven se hiciera con las riendas del país, otrora emblema de estabilidad en la región.