El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela rechazó la posición del Gobierno de España que cuestionó sin fundamentos los resultados de los comicios regionales, pese que la jornada se efectuó con la presencia de centenares de observadores internacionales (incluidos de la Unión Europea).

"El Reino de España realizó una serie de descalificaciones y juicios de valor que van a contramano del criterio mayoritario de los cientos de veedores y observadores electorales internacionales, quienes han dado testimonio del desarrollo de una jornada electoral ejemplar", indicó la Cancillería venezolana. 

"Los observadores han calificado al sistema electoral venezolano como uno de los más modernos y confiables del mundo".

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Las autoridades diplomáticas del país suramericano recordaron que los internacionalistas pudieron constatar la eficiencia y transparencia del sistema electoral.

"El Gobierno Bolivariano rechaza este desafortunado pronunciamiento que insiste, de manera errática, en mantener una posición plegada a los intereses de Washington, cuyo Gobierno supremacista tiene como único objetivo mantener la agenda de agresión en contra de Venezuela", sentencia el Ministerio de Relaciones Exteriores en Caracas.

Aludiendo al respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos, Venezuela pide al Ejecutivo español rectificar su pronunciamiento, "se exhorta al Reino de España a rectificar esa agotada posición condenada al más rotundo de los fracasos", agregan.

El pronunciamiento de Caracas llega después de que el Ministerio de Relaciones Exteriores de España cuestionara los resultados de los comicios regionales en Venezuela, aunque sin precisar aspectos puntuales de su dinámica.