Devotos de Honduras buscan esperanza en la religión y en su nueva presidenta
Miles de creyentes acudieron a la basílica de la Virgen de Suyapa con motivo de la celebración anual de la estatuilla de madera de la madre de Cristo.
Miles de creyentes hondureños acudieron ayer jueves al icono religioso más famoso de su país, rezando por el fin de la agobiante pobreza de la nación católica y por el éxito de su recién elegida líder izquierdista, Xiomara Castro
Acompañados por la nueva presidenta, los devotos acudieron a la basílica de la Virgen de Suyapa con motivo de la celebración anual de la estatuilla de madera de la madre de Cristo.
El 3 de febrero se conmemora la fecha en que un campesino descubrió en 1747 la estatua de 6,55 cm -la Patrona de Honduras- en la montaña de El Piliguín, cerca de la capital.
Xiomara Castro sustituyó al presidente derechista Juan Orlando Hernández, que dejó el poder bajo las acusaciones de narcotráfico y corrupción en un país donde al menos el 60 por ciento de los diez millones de habitantes viven en la pobreza.
Elegida en noviembre, Castro se enfrenta a una ardua lucha para reformar un país con una de las tasas de homicidio más altas del mundo y del que miles de sus ciudadanos han huido a Estados Unidos.
"Te pedimos con las palabras del Papa Francisco: Le ruego al Señor que nos conceda más políticos verdaderamente perturbados por el estado de la sociedad", dijo el cardenal Óscar Rodríguez en la homilía de la misa a la que asistió la presidenta.
"Es imprescindible que los gobernantes y los poderes financieros levanten la mirada y amplíen sus perspectivas".