La operación militar especial rusa en Ucrania mostró la incapacidad de los aviones no tripulados Bayraktar de fabricación turca de hacer frente la superioridad militar de Rusia.

“Al comienzo de la operación, se creó una imagen de un arma contemporánea que casi determina el resultado de los conflictos militares modernos”, dijo el escritor ruso Andrei Ryzchikov en su artículo publicado hoy en el diario ruso de Vzglyad.

Según el escritor, el ejército ruso derribó en un solo día a cinco drones, dos de ellos son del tipo Bayraktar, mientras desde el inicio de la operación rusa, un total de 123 drones han sido destruidos.

Por su parte, el experto del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías (CAST) de Rusia, Serguei Denisintsev, dijo que los drones generalmente no funcionan bien a menos que el enemigo no tenga activados a sistemas de defensa antiaérea.

Explicó que durante la guerra en la región de Nagorno-Karabaj, los drones Bayraktar destruyeron las fuerzas de Karabaj, sin embargo, tal cosa no puede suceder en Ucrania porque la Fuerza Aérea Rusa controla el espacio aéreo y, por lo tanto, la capacidad de Kiev de usar estas aeronaves es limitada.

Según el experto, elevar el número de drones tampoco conducirá a un aumento en la efectividad de su uso en estas circunstancias.

“La cuestión no radica en la cantidad sino en la capacidad de proteger los aviones Bayraktar que no pueden entrar en una batalla debido a su falta de misiles aire-aire, y no pueden enfrentar la superioridad aérea y destruir aviones de combate, ya que son un arma para lidiar con la tierra”, detalló.