Un comunicado de la cancillería argelina señala que el país "sigue con gran preocupación los recientes acontecimientos en el país hermano de Libia, tras el estallido de enfrentamientos armados en la capital, Trípoli".

Argelia hizo un llamado a todas las partes libias para evitar la escalada y  crear las condiciones apropiadas para la celebración de elecciones justas, por ser la mejor manera de resolver la crisis actual.

El llamado argelino se produjo después de  los enfrentamientos en Trípoli, la capital del país, entre fuerzas afiliadas al Gobierno de Unidad Nacional -encabezado por Abdel Hamid Dabaiba-, y otras que apoyan al gobierno de Fathi Bashagha, que dejaron un muerto y varios heridos horas después que este último llegara a la ciudad para intentar iniciar su labor de gobierno.

Se informa que Dabaiba se niega a entregar el poder excepto a un gobierno que llegue a través de un parlamento electo, según estipulan los  del Foro de Diálogo Político Libio.