Alberto Fernández pide remoción de la cúpula de la OEA en Cumbre de las Américas
El presidente de Argentina desestimó las exclusiones de Cuba, Nicaragua y Venezuela en la cita de Los Ángeles
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, afirmó que “la OEA, si quiere ser respetada y ser la plataforma política regional para la que fue creada, debe ser reestructurada removiendo a quienes la conducen".
Durante su discurso ante los jefes de Estado y de Gobierno que participan en la IX Cumbre de las Américas, Fernández, en su calidad de presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), recordó que la OEA fue utilizada "como un gendarme que facilitó un golpe de Estado en Bolivia".
También rechazó la intromisión que ha tenido lugar en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). "Se han apropiado de la conducción del BID, que históricamente estuvo en manos latinoamericanas", sostuvo ante sus pares.
El mandatario consideró necesario, por lo tanto, un "proceso de capitalización para tener más y mejores medios de financiamiento" en el organismo. En paralelo, Fernández reclamó que "la banca de desarrollo regional, sin más demoras, tiene que devolver su gobernanza a la América Latina y al Caribe".
Destacó además que la región de América Latina y el Caribe emergió "de la pandemia como la región más endeudada del mundo en desarrollo".
A propósito, "el peso promedio de la deuda externa supera el 77 por ciento del producto bruto regional", cifró el mandatario.
"Lamento que no hayamos estado presentes todos los que deberíamos estar”
El gobernante latinoamericano también criticó que no todos los países hubieran sido invitados a la IX Cumbre de las Américas a raíz de la decisión de EE.UU. de no invitar al foro hemisférico a Cuba, Nicaragua y Venezuela. "Lamento que no hayamos estado presentes todos los que deberíamos estar en este ámbito tan propicio para el debate”, subrayó.
Fernández cuestionó "el orden global" en el que "el mundo central ha fijado reglas financieras evidentemente inequitativas", y se refirió al bloqueo que soporta Cuba "desde hace más de seis décadas producto de los años de la Guerra Fría".
"Venezuela tolera otro, mientras una pandemia que asola a la humanidad arrastra consigo millones de vidas", expresó.
El gobernante sudamericano asumió que "con medidas de este tipo se busca condicionar a los Gobiernos", e insistió en que le hubiera gustado asistir a "otra cumbre de las Américas".
El presidente argentino observó que "para que no vuelva a suceder", el país anfitrión de la Cumbre de las Américas no debería conferir "la capacidad de imponer el derecho de admisión sobre los países miembros del continente".
A continuación, Fernández invitó a su par estadounidense, Joe Biden, a "abrirse en modo fraterno en pos de favorecer intereses comunes".
Al dirigirse al dirigente demócrata, el jefe de Estado enfatizó que la gestión que lo precedió "estableció una política inmensamente dañina para nuestra región".
Como ejemplos, Fernández cuestionó el papel de la Organización de Estados Americanos (OEA) en el golpe de Estado de Bolivia.
Además "fueron desbaratadas las acciones del acercamiento a Cuba en las que el papa Francisco medió", sostuvo.
Alberto Fernández reclamó la necesidad de iniciativas que establezcan un recargo a las ganancias adicionales que hayan tenido determinadas empresas por el aumento de los precios internacionales.
"La renta inesperada que la guerra entregó como un regalo a grandes corporaciones alimenticias, petroleras y armamentísticas debe de ser gravada para mejorar la retribución del ingreso", dijo.
El mandatario de Argentina reivindicó ante sus pares medidas de este tipo cuando esta misma semana su Gobierno envió al Congreso un proyecto de ley en este sentido.
En esta línea de discurso, Fernández reclamó la importancia de "políticas impositivas progresivas aun cuando las élites domesticas" las cuestionen "como un peligro para la calidad democrática".
"No hay teoría del derrame de riqueza que haya funcionado, ya es hora de que tomemos nota y actuemos en consecuencia", exhortó.
En otro momento de su disertación, el mandatario presentó dos propuestas. La primera, "organizar continentalmente la producción de alimentos y proteínas", señaló.
También sugirió que se desarrolle en la región el "potencial energético y de minerales críticos para la transición ecológica".
El mandatario mencionó, en concreto, cómo el cambio climático afecta la región del Caribe "de modo dramático", y reclamó "auxilios financieros" al defender que la región es acreedora ambiental y no es responsable de emitir los gases que producen el efecto invernadero.
Al final de su mensaje, Fernández expresó su deseo de "una América fraternalmente unida" que se comprometa a que "todos los seres humanos (…) tengan derecho al pan, a la tierra, al techo y a un trabajo digno".