Todo un éxito huelga general en Túnez, asegura dirigente sindical
El jefe de la UGTT, Noureddine Taboubi, declaró que el sindicato no dejará de hacer campaña hasta que se cumplan sus demandas.
El jefe de UGTT, Noureddine Taboubi, dijo que la huelga tuvo un éxito de más del 96%, y culpó al gobierno tunecino del fracaso de las negociaciones salariales.
"Este es un gobierno obstinado que siembra la discordia y difunde información falsa", dijo Taboubi en su discurso a los manifestantes.
"No dejaremos de hacer campaña, cueste lo que cueste, hasta que se cumplan nuestras exigencias", subrayó.
Los vuelos fueron cancelados, el transporte público se detuvo y las oficinas gubernamentales fueron cerradas en una huelga nacional de la principal confederación sindical de Túnez el jueves.
La Unión General Tunecina del Trabajo (UGTT) había convocado una huelga de hasta tres millones de trabajadores del sector público, deteniendo el trabajo en 159 organismos estatales y empresas públicas para exigir concesiones salariales y reformas en peligro.
La acción tuvo un amplio seguimiento. La huelga de los trabajadores del sector público en el aeropuerto de Túnez provocó la cancelación de decenas de vuelos, y el cierre de los servicios públicos y las oficinas de correos.
Alrededor de mil simpatizantes de la huelga se reunieron frente a la sede de la UGTT en el centro de Túnez, cantando el himno nacional y ondeando banderas.
La huelga se produce mientras Túnez se prepara para iniciar las conversaciones formales con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre un nuevo plan de rescate para su economía, cargada de deudas.
Los tunecinos se enfrentan a una inflación galopante, que alcanzó el 7,8% en mayo, y la UGTT ha exigido un nuevo acuerdo para aumentar los salarios del sector público, incluso con carácter retroactivo para el año pasado.
Mientras sus opositores dicen que la UGTT ignora los profundos problemas financieros del país, el FMI ha condicionado el acuerdo de rescate al apoyo de los sindicatos.
El gobierno tunecino ha presentado al FMI un plan de reformas que incluye la congelación de la masa salarial del sector público, el recorte progresivo de algunas subvenciones y la reestructuración de las empresas públicas.
Pero la UGTT ha advertido contra las "reformas dolorosas" destinadas a complacer al FMI.
"No exigimos una subida salarial, sino un reajuste del poder adquisitivo de los trabajadores para tener en cuenta la inflación", así como la supresión de un impuesto del 1% a la seguridad social introducido en 2018", indicó Taboubi.
El sindicato también ha exigido garantías de que las empresas del sector estatal, incluidos algunos monopolios y la compañía aérea de bandera Tunisair, sigan siendo de propiedad pública.