El portavoz de Defensa ruso, Igor Konashenkov, dijo en un comunicado de prensa que los misiles Kalibr de alta precisión y largo alcance lanzados desde el mar ayer sábado alcanzaron una sede de las fuerzas ucranianas cerca del pueblo de Shiroka Dacha en la provincia de Dnipropetrovsk".

El portavoz explicó que, como resultado del ataque, murieron más de 50 generales y oficiales de las Fuerzas Armadas de Ucrania, incluidos representantes del Estado Mayor General, la dirección del Grupo Kakhovka, las fuerzas de asalto aéreo y las formaciones que operan en los ejes Nikolaev y Zaporozhye.

Según el ministerio, misiles de alta precisión alcanzaron un tren que transportaba personal en la región de Dnepropetrovsk, y más de 100 soldados ucranianos fueron eliminados, y agregó: "La 56.ª Brigada de Infantería Mecanizada fue derrotada y hasta 200 combatientes murieron, incluidos  mercenarios extranjeros".

Los militantes de Azot están dispuestos a negociar

El embajador de la República de Luhansk en Moscú, Rodion Miroshnik, dijo que los militantes ucranianos sitiados en la planta Azot en Severodonetsk están enviando señales sobre su disposición a negociar.

Escribió en su canal de Telegram: "Continúa el contacto y la negociación con los militantes sitiados, pero está claro que los términos de su rendición no serán mejores que antes. Todavía están tratando de aprovechar las oportunidades e interrumpir los acuerdos de alto el fuego".

El embajador subrayó que las condiciones militares de estos militantes sitiados continúan deteriorándose a peor.