El viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, ha dejado claro que en un momento muy delicado por el conflicto de Ucrania y "la imprevisibilidad general de la situación internacional, la prevención de un conflicto directo entre las potencias nucleares y el mantenimiento de un diálogo de resolución de conflictos se consideran prioridad máxima para la diplomacia moscovita".

En declaraciones ofrecidas ayer miércoles en una sesión del Club Internacional Trialogue, el  diplomático ruso ha hecho hincapié en la necesidad de trabajar para garantizar "la estabilidad estratégica" y preservar "los regímenes de no proliferación de armas de destrucción masiva", así como, mejorar la situación en torno al control de armas.

En esta misma línea, ha resaltado el papel "estabilizador" de su país en varias regiones del mundo para constituir una cooperación multifacética con los países de la Comunidad de Estados Independientes, Asia, África, Asia Occidental y América Latina. "Prestamos atención prioritaria a los países realmente interesados ​​en desarrollar relaciones mutuamente ventajosas y equitativas con Rusia", ha precisado.

Rusia refutará propaganda de "imperio de mentiras"

Por otro lado, el viceministro Riabkov ha asegurado que el Kremlin se esforzará por refutar la propaganda del "imperio de la mentira" y proteger los derechos de los ciudadanos y las personas jurídicas rusas en el extranjero, frente a las crecientes campañas rusófobas.

"Podremos velar por nuestra seguridad e intereses nacionales y, asimismo, la protección de nuestros aliados ante cualquier amenaza y desafío", ha sostenido.

Efectivamente, desde el inicio del conflicto, el Kremlin ha dejado claro que Rusia no tiene planes para ocupar Ucrania, o provocar una guerra nuclear, sino que, el objetivo de su misión es la "desmilitarización" y la "desnazificación" del país vecino, dado que las potencias occidentales lo están utilizando para invadir el territorio ruso.

El Kremlin ha defendido su misión militar en Ucrania afirmando que el desarrollo de armas nucleares por Kiev con ayuda de EE.UU. era una amenaza real para todo el mundo.